Una pequeña diablilla angelical [Lucifer Morningstar]

TEMP 6: CINCO

Finalmente llegó al balcón del penthouse, al mismo tiempo que su padre.

— ¿a ti también te habló? — le preguntó ella.

— sí... ¡Maze! Recibimos tu mensaje, ¿cuál es la urgencia? Debo ir a probarme un traje.

— no hace falta, ¡necesito que eviten que lo mate! — arrojó la cuchilla, dando a la silla donde estaba Adán atado, justo a unos centímetros de la entrepierna del primer humano de la historia.

— ¿Adán? Creí que estabas muerto y sepultado, polvo eres, etcétera, ¿qué hace aquí? ¿Y por qué tú...?

— ¿dónde está Eva? — Lucifer entendió la situación.

— ay Maze... creo que eres peor que yo con el autosabotaje.

— ¿eso es posible? — preguntó su hija con sarcasmo.

— ¿la boda de mi mejor enemiga de canceló?

— secuestró a quien la oficiará. — respondió la demonio y ambos Morningstar se dirigieron a Adán, el padre le quitó la mordaza de la boca y la hija le apuntó al cuello con las alas.

— ¿dónde está Linda?

— no quiere hablar.

— se canceló la boda, lo logró, ¿qué es lo que pretendes?

— ¿crees que te lo diré? ¿Crees que se la haré fácil al Diablo que me robó dos veces a mi esposa?

— es exacto lo que harás, hojita de parra. — miró a su hoja, dándole una mirada de que guardara las alas y ella lo hizo. — dime... ¿qué es lo que más deseas, Adán? — le preguntó usando su poder mientras lo miraba fijamente a los ojos. 

— quiero... quiero ser un hombre mejor.

— vaya... esa no me la esperaba. — respondió la más joven.

— no, bueno, al principio sí secuestré a la doctora para sabotear la boda... pero ella luego me ayudó a darme cuenta de lo que necesito, resolver mis problemas.

— ¿cuáles?

— al crearme, Dios me dio un papel: bautizar a los animales, evitar una fruta y ser hombre, o sea no mostrarme débil y resolver todo con violencia. — los tres se miraron incrédulos de lo que acababa de escuchar. — pero las cosas han cambiado, las mujeres ya no obedecen a los hombres y los hombres... podemos ser vulnerables, lo cual... lo cual da miedo. — Lucifer asintió dándole la razón. — y los lobos, hay 800 razas de mascotas y algunas tienen nombres muy tontos, ¿"poodle"?, ciertos trabajos deben hacerlo solo los profesionales... en fin, ella dijo que lo que yo considero que debe ser un hombre estaba haciéndome daño, aparentemente se llama "masculinidad tóxica" y... muy común, lo bueno es que puede curarme, es buena onda, así que cuando termine el tratamiento, la soltaré.

— así no es como funciona... — comenzó Samara a decir.

— ¿así que dominas a una mujer para aprender a no dominar a las mujeres? — le preguntó Lucifer irónicamente.

— amigo, no tienes cura. — esta vez habló Maze.

— al menos lo intento.

— ¿a eso llamas intentarlo? Si necesitas terapia, pide una cita y pagale en efectivo o en especie si ella lo acepta, ten dignidad, hombre.

— tienes razón, viejo, veo que no encaré esto de la mejor manera, típico de Adán, que dura es la consciencia social, debo mejor en eso y lo haré, no le hice daño a la doctora, puedo llevarlos con ella.

— gracias, ¿ves?, hasta el más primitivo de los hombres puede evolucionar. — dijo Lucifer soltandolo de la silla. — y hasta el más vil de los demonios puede enternecerse, da miedo pero es cierto.