Capitulo 10 │ Laberinto

10K 670 788
                                    

Sunoo no sabe exactamente el motivo por el cual Chaewon los reunió a todos en el vestidor, lo único que menciono fue sobre una noticia que Sunghoon debía informarle a todo el personal de la editorial

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Sunoo no sabe exactamente el motivo por el cual Chaewon los reunió a todos en el vestidor, lo único que menciono fue sobre una noticia que Sunghoon debía informarle a todo el personal de la editorial. Ha pasado exactamente casi una semana desde la última vez que vio al mayor, completamente avergonzado después de cerrarle la puerta en la cara. 

¡Pero era su culpa por avergonzarlo de esa forma junto a Jungwon!

Sunoo negó inflando las mejillas, la editorial ha estado tan atestada de trabajo debido a que ya faltaba poco para navidad y estaban a días de que se publicara la nueva colección de invierno, por lo tanto Sunghoon y él casi ni se han visto.

―Me preguntó cuál será la noticia...

Sunoo se giro a ver a su amiga que estaba a nada de morderse las uñas. El pelirosa esperaba responderle cuando todos a su alrededor se acomodaron hasta formar una fila. Inclinaron levemente la cabeza y saludaron a Sunghoon quién ingresaba con su característico porte elegante y gélido seguido de su secretaría y un hombre desconocido para él.

―Nunca me voy a cansar de decir lo guapo que es― Sunoo apretó sus labios cuando su amiga murmuro esas palabras mirando maravillada a Sunghoon.

No podía culparla, Sunoo sabía el efecto que tenía Sunghoon sobre la población femenina. Realmente debía arrodillarse ante las deidades por otórgale la fortuna de poder ser el único en apreciar toda esa belleza.

Con y sin ropa.

A pesar de que el rostro de Sunghoon no mostró ninguna expresión, sus ojos se desplazaron hasta cierto tinte rosa, su mirada capto a Sunoo sonriendo, sus orbes avellana achicándose y sus mejillas tornándose de un color manzana. Sunghoon tuvo que morderse la piel interna de su mejilla y contenerse para no correr hacia el menor y besarlo abrasadoramente por lo bonito que se veía. Ha pasado una semana desde la última vez que tuvo la dicha de saborear esos labios cerezas, y sentir el calor de Sunoo.

Extraña al menor. 

Lo extraña como un desquiciado. Anhela besarlo y sentir su piel. Sentir su aliento cálido contra sus labios. Sentir sus curvas agraciadas entre sus palmas y su suave voz tintinear en sus oídos.

Lo deseaba de todas las formas posibles.

Pero era un hombre con responsabilidades.

Cuando estuvo frente a su equipo de trabajo, carraspeo un poco incomodo ante las miradas expectantes de su personal, aun no se acostumbraba a esto. A la atención que atraía no solo como el director de la compañía, sino también como editor en jefe.

―Seré breve― exclamó guardando sus manos dentro de los bolsillos de su impecable traje. ―Este es Jake― el pelinegro  señalo a su amigo. 

Jake sonrió saludando a todos con efusión 

―Es quién ocupará el puesto vacante como gerente administrativo de la editorial― anunció ―La señora lo escogió especialmente porque confía en sus habilidades. Así que le pido que respeten su decisión y sigan manteniendo el ambiente laboral que hemos formado desde que me uní al equipo. Jake será un excepcional compañero de trabajo y de ayuda, así que cualquier inquietud que tengan, pueden consultarlo con él. 

Unholy » SunSunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora