Aquel lobo negro corría tan rápido que las ramas y hojas secas debajo de él crujían con furia. Parecia un relámpago atravesando el bosque que se estremecía por el desespero y angustia que irradiaba el alfa.
YiXing solo podia pensar en JunMyeon, en qué su cachorro ya había nacido y él no había estado ahí.
Corria sin parar, sus patas incluso lastimandose por las rocas que ni siquiera procuraba esquivar con mucha agilidad. Tal era el grado de concentración del alfa que no ve venir el cuerpo de otro lobo que se estrella contra el de él, haciendo que se arrastre por la tierra.
El lobo negro se levanta tan rápido como un parpadeo y de la misma forma comprueba que está rodeado, de por lo menos, unos quince o trece alfas de pelajes marrones y grises quienes mostraban los colmillos en clara señal de amenaza, solo para recibir de YiXing un sonido tan atemorizante, crudo y que inspiraba a la mismísima muerte, saliendo de su ocico que mostraba una hilera de colmillos blancos, gruesos y jodidamente atemorizante.
A YiXing le importaba muy poco estar rodeado o saber que querían, les pasa a un lado tan rápido que los otros alfas tardan uno segundos en ir tras él. A YiXing no le importaba si querían matarlo, si querían comunicarle que le declaraban la guerra, en la mente del alfa solo estaban dos palabras que se repetían constantemente: Omega, cachorro, Omega, cachorro, Omega, cachorro.
Aquellos alfas no dejan de seguirlo, parecían bien entrenados, porque llegan a estar demasiado cerca de YiXing, tapándole el paso y evitando que avance más rápido. El lobo negro no tiene de otra más que desviarse para tomar otro camino, pero aún así, no dejan de seguirlo, le lanzaban mordidas que aunque no llegaban a lastimarlo, si le hacían perder velocidad.
Entre dos lobos lo acorralan lado a lado y lo empujan entre ellos, YiXing se harta, toma a uno del cuello de pronto y con una velocidad sorprendente, el alfa se retuerce entre sus afilados colmillos y fuerte mandíbula, y como si fuera un pedazo de carne blanda, lo rompe. Su ocico se llena de sangre y el aullido agonizante y lleno de dolor rompe el silencio del bosque y hace que los parajos en los árboles salgan huyendo.
Los alfas detrás de él se detienen, impactados por la sangrienta escena. Todos gruñían, pero nada comparado a al sonido del pobre alfa retorciéndose en el piso, con el cuello roto y convulsionando, sus aullidos de dolor podían hacer temblar a cualquiera. En un santiamén, el lobo negro se transforma en un hombre con una figura magestuosa, con su cuerpo sudando, lleno de rasguños y golpes. YiXing era atemorizante en todos los sentidos.
– Esto les va a pasar a cada uno de ustedes si siguen siguiéndome. – señala al lobo agonizando. No es necesario decir nada más, sigue con su camino de vuelta en su forma lobuna.
Cuando por fin llega, estaba más que agotado, pero nada podía impedirle estar como loco. Aparta a todos aquellos que se le cruzan y corre a buscar de forma desesperada a su esposo.
– ¡YiXing, cálmate! – LuHan lo aparta cuando trata de entrar a la habitación. YiXing solo llevaba un pantalón negro y el demás cuerpo desnudo.
– ¡¿Dónde está JunMyeon?!¡¿Y el cachorro?! – Mira a todos los presentes, todos eran omegas de servicio que estaban esperando impacientes.
LuHan trata de calmarlo– Tranquilo, están bien, ambos, pero no puedes entrar.
– ¡Es mi hijo y mi esposo! – exclama.
El Omega solo atina a ponerse frente a la puerta – Lo sé, pero tienes que entender que están atendiendo a JunMyeon y que no puedes–
El alfa se harta, hace a un lado a LuHan sin utilizar mucha fuerza y entra.
Los curanderos que estaban ahí se asustan pero de inmediato hacen reverencias al Rey.
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El Omega del Rey Zhang[LayHo'omegaverse']
FanfictionPara seguir manteniendo la alianza entre los clanes, cada tres años el Reino de los Akame les entregaba a los Xi'e sus omegas más hermosas. JunMyeon no quiere que su hermana menor sea entregada a esos alfas así que se ofrece a ocupar su lugar, lo q...