The Walking Dead: Un nuevo comenzo en el fin del mundo

92 - Michonne

Al ver esto Michonne no tuvo tiempo de observar el interior de la cabina, por lo que de primera intención quiso volver corriendo rápidamente de donde venía, pero escucho el sonido de un motor no muy lejos de su posición.

Cuando se acercó para mirar, observo a lo lejos como los autos se estacionaban lo más que podían en el interior del bosque, y rápidamente ella corrió hacia su compañera que no estaba muy lejos, las dos se tacharon en la hierba para ocultar sus figuras.

"¿Qué es lo que pasa?" Michonne volvió corriendo a toda prisa y después de verla le pidió que se agacharan, pensó que ella había encontrado algo mal.

Al escuchar esto, Michonne hizo una señal para guardar silencio e inconscientemente toco el mango de la espada en su espalda con la mano derecha. Mientras tanto, sus ojos miraba fijamente el espacio abierto no muy lejos.

Después de dudarlo un poco, Michonne supo que debía resolver las dudas de la otra parte y dijo: "¡Solo había dos muertos en el lugar, pero al parecer vienen personas, no hay que hacer ruido!"

Pensando en esto, ella no quiso revelar mucho por ahora, no era el momento y muy posiblemente la otra parte las puede descubrir si siguen haciendo toda, por lo que no mencionó nada más.
　　
Cuando las dos se clamaron, vieron un Jeep pasar hacia el interior y unas cinco personas salieron del auto.

"¡Vamos!"

El que acababa de hablar era el líder, mejor conocido como el Gobernador, quien ordenó a sus subordinados que se dispersarán y limpiaran los caminantes que estaban en los alrededores.

El Gobernador también miró a su alrededor antes de caminar cerca del helicóptero derribando. Lo primero que vio fue el cadáver cortado en el camino.　　

"¡Gobernador! ¡Alguien parece haber estado aquí, hay caminantes eliminados en los alrededores de este lugar!" Martínez señaló los cadáveres esparcidos alrededor.

El rostro del gobernador se volvió aún más sombrío, y se inclinó hacia adelante para mirar dentro de la cabina sin decir una palabra, ¡efectivamente! ¡Apareció la misma herida en la cuenca del ojo de la otra persona!

Los ojos del gobernador se entrecerraron levemente y volvió a mirar a su alrededor inconscientemente, antes de decir a sus subordinados: "¡Tal vez alguien ha estado aquí, como también tal vez alguien de los heridos ha escapado! Busquen en los alrededores y vean quién ha escapado, no pudieron haber ido tan lejos."

"¡Si!"

Todos los subordinados que recibieron la orden y comenzaron a caminar más lejos, buscando pistas dejas por personas en la tierra.

"¡Se fueron por este lugar!" Un hombre de piel negra solo una hilera de huellas en el suelo y le grito a las personas para que vinieran a ver. Esta era la dirección donde Airon y los demás se habían retirado antes. Martínez fue el primero en llegar y verificar las huellas en el suelo.

Después de algún tiempo, levantó la cabeza y le dijo al Gobernador con un tono antinatural: "¡Son pisadas de muchas personas! ¿Todavía debemos perseguirlos?"

"Hu..." Los ojos del Gobernador se volvieron más fríos, luego se volvió hacia el soldado muerto a su lado y después de un tiempo, de repente piso su cara, luego piso continuamente la cara del soldado hasta convertirlo en un desastre sangriento como si estuviera desahogando su furia.
　　
Mientras todos estaban en los alrededores, Martínez solo se limitó a ver el comportamiento del Gobernador sin decir una palabra. 　

"¿Quién eres? ¡No te muevas!"

De repente, varias personas escucharon a alguien gritar no muy lejos del bosque, todos se movieron hacia el sonido de la voz y descubrieron que uno de sus compañeros había levantado su arma hacia un lugar.