05

982 123 45
                                    

Frente a sus ojos veía a nada más y nada menos que a Román Riquelme.
Amigo de Pablo que a pesar de que Lionel no lo admitiera, siempre había sentido un poco de celos por su relación.

-¿Está Pablo?- preguntó con su rostro serio.

-Hola- saludó mirandolo. -Sí está y dudo mucho que quiera verte- lo desafió con su mirada haciéndole entender que él ya sabía todo lo ocurrido.

-Que lo decida él, ¿No?- Scaloni pasó pechandolo un poco y se adentró en la casa buscando a Aimar.

Por lo bajo y detrás de él, Lionel escuchó a Riquelme bufar bajo y la puerta cerrarse.
Entró a la habitación de Pablo y lo encontró sin remera, ¿Qué carajo estaba pasando acá? Y otro detalle no menor, que Scaloni había pasado un poco por encima, era a Román usando una remera del dueño de la casa.
Pablo no se había percatado de la presencia de Lionel hasta girarse.

-Hola- murmuró Pablo bastante sorprendido de ver a Lionel, había perdido un poco la esperanza después de dos días en los que ni siquiera había aparecido para disculparse.

-¿Qué hace este acá? ¿Y qué haces vos sin remera?- bombardeó de preguntas y Aimar solo quería gritarle en el rostro algo así como un ¿Qué mierda le pasaba?

-¿Viniste para tratarme así?- preguntó Pablo poniéndose una remera que sacó del placard.

-No, pero cómo querés que te trate con este acá- refregó su rostro.

Aimar rodó los ojos, no tenía ganas de discutir.

-Primero que nada, le sabes bien el nombre- murmuró el de rulos. -Y segundo, ¿Para qué viniste? Porque parece que sólo querés discutir y yo en eso no me engancho- aclaró sentándose en la cama.

"Lionel respirá" Se dijo Scaloni a sí mismo, había venido para pedirle perdón, no para hacerlo sentir mal.

-¿Podemos hablar sin que esté este?- consultó Lionel mirando de reojo a Román quien se encontraba en la puerta.

-Se llama Román y lo sabes Lionel, compórtate o te corro de mi casa- repitió Aimar, no estaba para bancarse los comportamientos de Lionel, no en ese estado. -¿Podés esperar en la cocina? Por fa- pidió Aimar y su amigo asintió y salió cerrando la puerta.

-Gracias- murmuró Scaloni mientras se sentaba en la cama.

-Como sea- murmuró Aimar sentándose a su lado. -¿A qué venías?-  consultó.

-A pedirte perdón- explicó Scaloni. -Pero ya la cagué de nuevo- suspiró refregandose el rostro.

-Ya está- negó Aimar mirándolo.

Lionel asintió.
-Perdón por haberte tratado así el día del río, tenía un quilombo acá- asintió tocando su cabeza.

-¿Y por qué no me dijiste? Capaz podía ayudar- murmuró.

-Porque era sobre vos- lo miró. -Sobre nosotros- confesó agarrando sus manos.

-¿Y qué era?- preguntó entrelazando sus dedos, se sentía tan bien volver a tocarlo.

-Me costaba aceptar lo que siento por vos Pablo- admitió acariciando sus manos con suavidad.

-¿Y qué sentís por mí?- preguntó bajando la mirada, tenía miedo de la respuesta.

-No sé- eso dolió para Pablo. -Pero sé que lo que siento es algo fuerte Pablo, me haces sentir muchas cosas a la vez y me asusta un poco- admitió, para Lionel no era fácil hablar de sus sentimientos pero haría de todo para enmendar el error que había cometido con Pablo.

-Me asustaste bolu'- rió bajo sin romper la burbuja en la que estaban. -Yo sé que no es fácil para vos aceptar lo que sentís, nunca antes te había gustado un pibe- Scaloni asintió. -Pero tenés que saber que no está mal Lio- negó.

-Ahora lo sé- asintió acariciando su mejilla, Pablo sonrió cerrando los ojos y repitió el acto de aquella vez dejando un beso en la mano de Lionel.

-Te extrañé boludo- admitió Aimar y Lionel rió sintiendo como el más bajo se tiraba encima abrazandolo.

-Yo te extrañé más- murmuró el otro correspondiendo el abrazo, todo se sentía tan bien.

-Lo dudo mucho- rió bajo Aimar escondido en el cuello de Lionel, ambos realmente se habían extrañado.

-Me haces cosquillas ahí- rió Lionel con sus manos coladas en la remera de Aimar quien obviamente se había percatado de esto ya que su corazón iba a mil revoluciones.

-¿Tenés cosquillas en el cuello?- rió Aimar aún escondido ahí.

-No me jodas Aimar- giró su cabeza en un intento de verlo pero aún así no podía.

-¿Joderte? ¿Yo?- soltó una risa baja y soltó un beso en su cuello sin darse cuenta. Aimar, al darse cuenta de lo que había hecho se quedó estático, "Dios decime que no la cagué" Pensaba Pablo.

-Que lindo- Lionel sonrió, realmente no lo había incomodado o algo por el estilo, Aimar respiró aliviado.

Después de un rato más en la cama, y sí, en esa posición un tanto comprometedora con Aimar encima de Scaloni, salieron de la pieza.
Apenas salieron, no faltó la mirada invasiva según Lionel, de Román.

-¿Se reconociliaron?- preguntó Román mirando a su amigo y Aimar asintió con una sonrisa en su rostro.

-Sip- asintió, su humor había mejorado muchísimo.

Román estaba un poco preocupado por Aimar, no le gustaba que el humor de su amigo "dependiera" del estado de su "relación" con Scaloni.








858 palabras
n/a: siento q esta medio choto ayuda😭 capaz lo edite desp, comentenn💞💞
pásense por el shot q subí, tmb es de lio y pablo💞

𝗔𝗟𝗚𝗢 𝗖𝗢𝗡𝗧𝗜𝗚𝗢; 𝘀𝗰𝗮𝗶𝗺𝗮𝗿 ✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora