Pasar mi jubilación en un juego - Parte 1

Capítulo 121: Bestiario

Más tarde esa noche, el grupo se encontró en los establos, preparándose para partir haciendo más espacio dentro del carruaje para todos.

Antes de irse, Eisen también se dirigió rápidamente a la librería donde compró suministros antes y compró un mapa para que pudieran encontrar el camino hacia la Ciudad Mágica. Antes era una historia diferente, porque Bree ya conocía el camino de Melroe a Ornier, pero nadie de este grupo había estado allí antes. Pero afortunadamente, no había muchas ciudades mágicas grandes, y de la que estaban hablando parecía ser la más grande del continente.

Ahora que tenían una idea aproximada de la ruta que debían tomar, todo lo que el grupo debía hacer era asegurarse de que hicieran todo lo que querían hacer antes de irse, y eso incluía una cosa.

Eisen quería ver si podía hacer algo para que Jyuuk lo ayudara con el almacenamiento de monstruos, ahora que su piel estaba cubierta en gran parte por los monstruos que Eisen le trajo.

Y ya tiene algunas ideas para eso. Pero primero, tendría que hacer un nuevo libro, que fue otra razón por la que fue a la librería, a comprar papel A3 grande para que las páginas fueran lo suficientemente grandes. Esto significaría un poco más de trabajo, pero al final no sería un gran proyecto. Pero dado que Jyuuk tal vez usaría esto y lo llevaría con él con más frecuencia, quería que se viera bastante agradable y básicamente genial.

Para eso, Eisen usó un pequeño marco de madera que armó para ayudar a encuadernar el libro de una manera que lograra precisamente eso. Lo que hizo fue tomar una cuerda gruesa y enrollarla sobre sí misma varias veces para hacerla aún más gruesa para que tuviera el grosor de un dedo meñique, mientras tenía una consistencia similar a la de una cuerda, y luego ató cuatro partes de esa cuerda de arriba hacia abajo. parte inferior del marco, con dos de ellos cerca del centro y uno cerca de cada extremo, y luego comenzó a trabajar correctamente en todo lo demás.

Ya había reunido rápidamente los paquetes de papel que necesitaba y había perforado seis agujeros en cada hoja, para poder comenzar a coser todo de inmediato.

Cuando Eisen hizo eso, usó un método ligeramente diferente al anterior. Después de sujetar el primer bulto con el lomo hacia la cuerda gruesa que ató al marco, simplemente empujó la aguja a través del primer orificio en un extremo del bulto y luego la volvió a sacar por el siguiente orificio, que estaba colocado para estar directamente al lado de la primera cuerda gruesa.

Luego, simplemente rodeó ese hilo con forma de cuerda y tiró de la aguja por el mismo orificio para volver a estar dentro del paquete. Eisen repitió esto con los otros agujeros antes de agregar el segundo paquete, lo que hizo simplemente sacando la aguja del paquete a través del último agujero y moviéndola hacia el agujero directamente arriba, antes de hacer lo mismo que hizo con el primero. paquete y básicamente cosiendo la cuerda en forma de cuerda a los lomos de los paquetes de papel. Cuando llegó al final del segundo paquete, Eisen simplemente ató el comienzo de la cuerda a la parte de la cuerda que acababa de salir del último agujero.

Eisen repitió esto mismo una y otra vez, hasta que logró unir todos los paquetes con éxito.

Una vez hecho esto, cortó la cuerda parecida a una cuerda que estaba atada al marco de madera, dejando alrededor de una pulgada a una pulgada y media para continuar en ambas direcciones cuando se ve desde el lomo del libro.

Luego, Eisen volvió a presionar todo el papel colocando una tabla grande y plana sobre todo y luego aplastándolo con algunos libros más, antes de aplicar pegamento en el lomo.

Mientras se secaba el pegamento, Eisen comenzó a prepararse para hacer las cintas para la cabeza, que se suponía que protegerían aún más el libro en cada extremo. Eran simplemente unas pequeñas tiras de cuero tan largas como el grosor del lomo.