Love Criminal (2da Edición) - El Imperio Hudson

Capitulo 36: Es imposible.

Llegamos a la mansión de mi padre y bajaron rápidamente a Dereck. Lo llevaron a su habitación y lo acostaron lentamente para no poder lastimarlo aún más.

- Vas a estar bien, Dereck - me acerque a él.

- Tranquila - sonrió con una mueca. - He pasado cosas peores - gimió de dolor.

- ¡¿Cómo quieres que este tranquila cuando estas herido?! ¡Y por una bala! - exclame.

Dereck rio.

- Baja a la sala de estar y conoce a tu hermano - sonrió - ¿Te parece?

- No te dejare aquí - fruncí el ceño.

- Ve, el doctor se hará cargo de mí.

- Esta bien. Vendré pronto. - bufe para luego salir de la habitación.

Camine por los grandes pasillos hasta que llegue a la sala de estar.

- Hola - hable en voz baja.

El chico que estaba sentado de espaldas hacia mí se tensó y detuvo todo lo que estaba haciendo, que en este caso estaba tomando una copa de Whisky.

- Soy Emma... - empecé a jugar con mis dedos - Tu hermana - dije con dificultad lo último.

El chico se paró y volteo lentamente.

No puede ser, es imposible.

- Hola querida hermanita - sonrió con malicia... Zachary.

Narra Ian:

Cada hora de este largo día trate de olvidar a Emma. Es imposible hacerlo, cada segundo esta en mi cabeza. Sean me ha dicho que vaya de nuevo a buscarla y hablemos pero no tengo la valentía suficiente para hacer tal cosa.

Después de que fui a decirle a Nancy sobre Emma me dirigí a hacer apuestas y a tomar sin control. Me he peleado con Sean por discutir por cómo estaba actuando y también he discutido con Yulissa que vino preocupada a preguntarme sobre qué había sucedido durante la ida a la otra punta de Los Ángeles. No le respondí, era absolutamente obvio que no iba a hacerlo. No quería hablar nada de lo que había presenciado haya. Quería olvidarlo.

- Debes dejar de comportarte como un niño y actuar como un hombre - dijo una voz femenina a mi lado.

Voltee a verla enfadado dispuesto a mandarlo a la mierda pero cuando note quien era me tranquilice.

- Necesito estar solo, Alisson - suspire pesadamente.

- No. Necesitas a Emma - sentía su mirada en mí pero yo no me inmutaba a mirarla a ella.

- ¿Vienes a hablarme de ella? La puerta está a unos metros - di otro trago a mi cerveza.

- ¡No seas infantil! - Alisson golpeo la mesa con fuerza que hizo sobresaltarme.

Antes Alisson huía de mí, ahora yo quiero huir de ella.

- Déjame en paz - hable duramente.

- No lo hare - dijo segura.

- ¿Sabes que pierdes tu tiempo? - dije con sarcasmo.

- Espero que no - pidió un trago. - Emma te apreciaba... muchísimo. Hace unas semanas no éramos nada pero ahora somos muy unidas ¿Sabes porque? - pregunto y negué con la cabeza - Porque tuve la decencia de irme a perdonar con ella. - Dio un trago - Eso deberías hacer tu.

- Le dije que todo era mentira - gruñí.

- Pues demuéstrale que estabas equivocado.

- Le dije que no la amaba.