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Cuando Juan dijo eso las orejas del híbrido se movieron algo inquietas, no sabía si era por curiosidad o era por algún mal presentimiento.

¿Mostrarle un hechizo? ¿Porque quería mostrarle un hechizo justo ahora? Tenía mejores cosas que hacer, como trabajar.

Spreen comenzó a negarse a querer ver el dichoso hechizo de Juan, diciendo que está demasiado ocupado para eso, pero al parecer el castaño estaba decidido.

Suspiro y accedió a qué le mostrará el hechizo para que lo dejara en paz de una buena vez y pueda irse.



Mientras Juan, leía una y otra vez el hechizo, si se equivocaba en alguna palabra puede terminar en cualquier cosa, no iba a usar el mismo hechizo que uso el otro Juan, sino otro.

Si usaba el mismo hechizo spreen sentiría mucho dolor y comenzaría a gritar y eso llamaría la atención de los trabajadores que seguramente estaban abajo.

Al parecer ahí varios tipos de hechizos de control mental y él iba a usar uno que es algo difícil de hacer pero igual de efectivo, era difícil porque debía hacer contacto visual con la "víctima" por bastante tiempo y bueno, el oso aparte de no ser muy cooperativo usaba esos malditos lentes negros que podían joderle todo el plan

No sé cómo lo logro, pero convenció a spreen de sacarse los lentes, diciendo que era necesario para su "truco de magia barato", al parecer el híbrido quería acabar con esto rápido.

- bien, ahora debemos hacer contacto visual -

- fua loco ¿Algo más querés? -

Spreen se quejo, pero tampoco se negó, cómo dije quería terminar con esto rápido, hizo contacto visual, algo que al principio le pareció incómodo pero se fue acostumbrando.

- ¿Ahora que gafotas? -

Pregunto, pero no recibió respuesta, en su lugar, Juan comenzó a recitar algo en lo que él pensaba era latín, ya que bueno, es uno de los lenguajes que el mago conoce y él lo escucho hablar.

Los primeros minutos no paso nada y eso impacientaba a Spreen, estaba por alejarse y hechar al mago de su oficina pero una luz verde se lo impidió.

Los ojos de Juan pasaron de ser de un marrón algo oscuro a brillar de un color verde bastante fuerte ... Raro ¿Este era el hechizo? ¿Cambiar el color de sus ojos? Si era así que hechizo de mierda.

Juan lo agarro del menton, diciendo de una manera indirecta que no apartara la vista por nada en el mundo y aunque spreen no quería seguir con esta tornería, por alguna razón ... No podía dejar de mirar.

Era extraño, quería dejar está estupidez, sacar a patadas al mago y seguir con su trabajo que era más importante que esto, pero su cabeza al parecer quería mirar esos orbes verdes, esos orbes verdes que poco a poco se volvían algo ... ¿Adictivo? De ver


Juan noto eso y sonrió un poco, que spreen no oponga resistencia y no dejará de mirarlo era buena señal, estaba funcionando, solo no tenía que romper el contacto visual.

En pocos minutos ya podía ver cómo el hechizo estaba haciendo lo suyo, viendo a un spreen que apenas podía mantener los ojos abiertos, cabeceaba y bostezaba pero nunca dejaba de mirarlo.

Spreen parecía más perdido que antes, seguramente por el repentino sueño que debe sentir, era algo normal según el libro.

Ahora solo quedaba un paso, Juan acercó una de sus manos al híbrido, no llegando a tocarlo pero si estaba bastante cerca de él, junto sus dedos y dió un chasquido bastante fuerte para que escuchará.

𝐒𝐞𝐜𝐫𝐞𝐭𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora