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Respire hondo tratando de tranquilizarme, había hablado con Erick pero no salió como esperaba, solo empeoro. Al menos logré que venga en mi carro y no con aquel chico y sus otros amigos, Zabdiel iría con nosotros al principio me negué pero era eso o que Erick se subiera con ellos

—Se supone que estaría de regreso Zabdiel

Lo mire por el retrovisor serio, solo se encogió de hombros y siguió concentrado en su celular. Observe a Erick imitando la acción de su hermano

Se supone que no me involucraría mas con él, estaba cumpliendo mi promesa. Estaba esperando a morir lentamente y lo estaba logrando, pero Zabdiel tuvo que interferir. Hice una mueca y arranqué

No pienso si quiera tocarle un pelo aunque me queme y mate por dentro.

[...]

—Deberías descansar has manejado ocho horas seguidas—Alce la mirada de la arena y le dediqué una pequeña sonrisa sintiendo mi corazón latir al escucharlo. Parecía un puberto hormonal por solo escuchar su voz

—Estoy bien Er—Me miró por un par de segundos y solo asintió para ir detrás de una chica rubia que bajaba de la camioneta en donde venía el grupito de amigos del chico castaño que coqueteaba con Erick

—Si de verdad quieres recuperarlo te aconsejo que seas como garrapata—Me sobresalté al escucharlo detrás mi

—Cállate, fuiste tú el que provocó todo esto

—Y ahora intentó que vuelvan a estar juntos, es tu mate Joel—se posicionó delante de mí y me dio un leve empujón—De verdad lo siento por todo pero tampoco es culpa mía que le hayas mentido desde un principio

—Ya deja eso a un lado, quiero descansar—Camine al hotel sintiendo los pasos de Zabdiel a un lado—Supongo que el chico quiso pasarse de listo y hacer que algunos duerman en pareja

Escuche su risa y solo lo ignoré entrando a recepción

—Joel Pimentel, necesito las llaves de mi habitación y dígame en qué habitación se encuentra Erick Colón—No me tome la molestia en saludar, quería solo subir y dormir

—Buenas tardes, el joven está en la 201 ya tiene acompañante—Deslizó su mano por la mía sonriente mientras me entregaba mis llaves, no tenía que ser vidente para saber que estaba coqueteando

—Bien hubo una equivocación, cámbielo a mi habitación—Asintio guiñándome un ojo, me alejé bruscamente de ella y me metí al ascensor. Pero una mano se atravesó antes de cerrar las puertas

—Acaso no oyes que te estoy diciendo que me esperes—una chica bajita de pelo castaño y ojos mieles estaba agitada aún lado mío. Fruncí el ceño al ver como se había atrevido a hablarme de ese modo—No me ignores grandulón

—No me interesa, hay demasiados ascensores

—Pero yo quería subir a este—La ignoré viendo por el piso en que iba, el siguiente era el mío—Lo que tienes de grande lo tienes de idiota—Susurro, giré a encararla dispuesto a decirle que era una chica odiosa pero las puertas se abrieron—Nos vemos grandulón

La seguí con la mirada, estaba en mi mismo piso justo a dos puertas de mi habitación, menuda suerte

—¿Grandulón? Que original—Pegue un brinco al escuchar a Erick. Muchos sustos por hoy.

Giré a verlo. ¿Por que no percibí su olor?

—Pensé que estabas con tu amiguito

—Si, perdón por arruinar el momento con tu grandulona—Tenía los brazos cruzados y dos maletas en cada lado, me permití obsérvalo. Se había hecho dos aretes en la oreja, su aspecto físico había cambiado un poco en estos meses, se lo veía un poco más maduro. Y sin embargo mi corazón se salía cada vez que estaba cerca de mi—Haz el favor de abrir la puerta necesito cambiarme

Paso a un lado de mi viéndome mal, y ahí fue que entendí, se había puesto celoso. Solté una pequeña risa y me apresuré a donde me estaba esperando

I met you  [ ᴊᴏᴇʀɪᴄᴋ ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora