11. Por mi.

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- ¿Qué hay de tu color favorito? ‒ Preguntó el alto rubio que se encontraba sentado a su lado.

- Negro, definitivamente. ‒ Contestó, mientras jugaba con sus dedos. ‒ ¿El tuyo?

- Bueno, es muy parecido al tuyo, casi igual.

- ¿Casi igual? ¿Es gris muy obscuro o algo así?

- No, pero cerca. ‒ Dejun podía observar una sonrisa tímida en el rostro del coreano. ‒ Es verde. ‒ Por más que quiso retenerlo una carcajada broto de él.

- ¿Verde? ¿En que mundo el verde es parecido al negro, Jaehyun? ‒ El chino volteo a ver al otro, quien se veía un poco avergonzado, pero feliz a la vez. ‒ No tiene sentido.

- Estoy tratando de hacer que nuestros gustos encajen, ya sabes. ‒ Dijo el más alto con una gran sonrisa en su rostro. ‒ Nos gustan cosas muy diferentes, es difícil encontrar algo que tengamos en común.

- No tienes que hacer que encajen, me caes bien así. ‒ Dejun esperaba que eso no sonara a que le estaba dando alas, pero en realidad el chico de hoyuelos le parecía alguien muy agradable. Apenas había hablado con el unas dos veces más, aparte del día en el que se conocieron y Jaehyun siempre lo hacía reír y disfrutar el tiempo a su lado.

- No es suficiente caerte bien. ‒ Se tenso un poco, no quería tocar ese tema, definitivamente no.

- Me toca hacerte ahora yo una pregunta. ‒ Jaehyun solamente asintió en respuesta, por lo que continuo. ‒ ¿Te gusta algo más aparte de los videojuegos?

- Oh. A veces cocino, mi mamá trabaja todo el día, así que de vez en cuando yo tengo que preparar la comida y me gusta, lo disfruto bastante. También juego futbol, no muy seguido, pero me gusta y me desestresa.

- ¿De verdad? ‒ El chino se encontraba sorprendido, no creyó que Jaehyun fuera del tipo bueno en la cocina, el mismo no era bueno en la cocina y odiaba la idea de cocinar. A sus 14 años de vida con mucho trabajo había calentado un poco de agua en la estufa. ‒ No esperaba eso, pero es algo bueno, ¿No? Así no te vas a morir de hambre.

- Si, morir de hambre no me llama mucho la atención, aunque, si no supiera cocinar tampoco moriría de hambre, existen los microondas. ‒ Dejun asintió, el rubio tenía razón.

- Mhm, tienes razón, olvide el microondas.

- ¿A ti que te gusta hacer? Nunca me lo has dicho.

- Nunca suena muy dramático y solo hemos hablado pocas veces. ‒ Dijo riendo. ‒ Pero si, no te lo he dicho antes. ‒ Razonó el chino y luego se quedo pensativo unos segundos. ‒ No sé que me gusta, hace algunos años me gustaba dibujar, pero tiene muchísimo que no lo hago.

- ¿No te gustan los deportes? ‒ Dejun miro al rubio a su lado, antes de comenzar a sacudir su cabeza, negando.

- No, no me gustan.

- ¿Bailar, cantar, la fotografía?

- No, ninguna.

- ¿Música? ¿Tocas algún instrumento?

- No sé tocar ni la flauta.

- ¿Leer? ¿Los comics? ¿Mangas?

- Me gusta leer, fantasía más que nada, Harry Potter, Cazadores de Sombras, cosas de ese tipo.

- ¿Has leído todos los libros de Harry Potter?

- Si, los leí todos. De hecho los he leído varias veces. ‒ Contestó el chino orgulloso.

Je te dédie la lune (Yuxiao)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora