[Capítulo 13]

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Llevaba esperando algunos minutos, P'Kim no abría la puerta, a pesar de que toqué, nadie respondió

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Llevaba esperando algunos minutos, P'Kim no abría la puerta, a pesar de que toqué, nadie respondió. Hace unos minutos que mi examen había culminado, así que pensé que sería buena idea venir a pasar el rato. Quería creer que en verdad había salido, pero el sonido de pasos y de cosas siendo levantadas y dejadas en algún lugar, me inquietaba un poco. Intenté llamar a su celular, y antes de poder hacerlo, sentí unos pasos venir hacia mí, era P'Kinn, y se veía furioso. En cuanto llegó a mi lado, forzó la cerradura y grande fue mi sorpresa al ver quien era el que estaba dando vueltas en el departamento de P'Kim. P'Kinn me ordenó que fuera a la habitación del lugar, estaba yendo, pero mi vista se desvió al arma que había en el mesita delante del sofá. Corrí a la habitación y toqué varias veces la puerta.

— P'Kim -llamé- soy yo, Porchay -el seguro de la puerta se quitó-

— Cielo santo, creí que me daría algo, tener a ese bastardo dando vuelta allá afuera es realmente escalofriante -lo oí suspirar y me jaló dentro de su habitación-

— P'Kinn está con él, me asusté cuando entramos y vi el arma en la mesita -dije y él se sentó en la cama- ¿estás bien?

— Sí, es sólo que realmente estaba asustado, no había como defenderme, si lo hacía como siempre lo hago, el bebé y yo corríamos peligro -fue su respuesta-

— ¿Y P'Ken? -cuando entramos no lo vimos, se supone que P'Kinn lo había enviado para mantener a salvo a P'Kim- 

— Tenía que hacer algunos mandados, dijo que volvería pronto -regaños se escucharon afuera de la habitación-

Ambos salimos y vimos a Tawan, inconsciente, en el piso mientras que P'Kinn le gritaba uno y mil insultos a P'Ken. Él solo bajaba la cabeza, disculpándose por no haber regresado a tiempo. P'Kim se acercó y dijo que todo estaba bien, sin embargo, no fue suficiente para que los humos de P'Kinn se dispersaran. Me acerqué y con un pie le di la vuelta a Tawan. No lo había matado, solo estaba inconsciente.

— Menos mal que no lo mataste en mi departamento -dijo P'Kim hacia su hermano mayor- de lo contrario, hubiera hecho que limpiaras con tu ropa o con tu lengua la sangre derramada -amenazó y luego se llevó a P'Ken, salvándolo de la furia de P'Kinn-

Luego de eso, todos fuimos llevados al complejo de la familia mayor. Bueno, luego de que P'Kim se duchara y se pusiera algo más cómodo, salió con una camiseta blanca, pantalones deportivos, color gris y unas zapatillas del mismo color que la camiseta.

El camino a casa fue largo, P'Kim venía en silencio, traía auriculares puestos y cabeceando. En casa, mi hermano y P'Fah dormían mucho. No sé si sea por el embarazo, pero cada que quería hablar de algo o ir al jardín con alguno de ellos, los encontraba durmiendo o simplemente me decían "otro dia" o "más rato", y ahora P'Kim también se unía a ellos. ¿P'Vegas y Macao harán lo mismo?.

||𝐓𝐡𝐞 𝐌𝐚𝐟𝐢𝐚 𝐈𝐬 𝐏𝐫𝐞𝐠𝐧𝐚𝐧𝐭Donde viven las historias. Descúbrelo ahora