||𝐓𝐡𝐞 𝐌𝐚𝐟𝐢𝐚 𝐈𝐬 𝐏𝐫𝐞𝐠𝐧𝐚𝐧𝐭

[Capítulo 23]

Vegas sabía lo que estaba haciendo. Lo haría cuantas veces fueran necesarias. No pudo salvar a su hermano, pero salvaría a Kim y a Porchay, no importaba el costo, lo haría de todas formas. Si tenía que permanecer al lado de Tawan toda su vida, eso haría. No quería dejar a Pete solo, pero no había de otra.

— Vegas, tenemos que buscar otra forma de traer sanos y salvos a Kim y a Porchay. Podemos pensar en otra solución -Pete insistió-

— ¿Qué propones tú?, él no les dará así como así a mi primo y al hermano de Porsche. Lo conozco lo suficiente como para saber que él no da a torcer su brazo tan fácilmente.

Pete se sentó en el césped y pensó mientras veía un punto en la nada. En su cabeza recreaba todas las posibles soluciones. Podían enviar a Big con Vegas, y cuando tengan a Kim y a Porchay a salvo, Big podría sacar de alguna forma a Vegas. Rápidamente negó, esa no era buena idea. Probablemente Tawan tenga con él a más hombres armados. Big no sería suficiente, y si enviaban a más gente con el líder de la familia menor, sería sospechoso. Terminarían poniendo en peligro la vida de dos personas, Tawan no lastimaría a Vegas por más que quisiera, primero se pegaría un tiro antes de hacer eso.

— Podemos esperar afuera. Big, Ken, Arm, Pol, Nop y yo -propuso y Vegas lo pensó-

— Puede ser, pero primero tenemos que consultarlo con Kinn -ambos asintieron y entraron a la casa-

Kinn le dio una mirada llena de tristeza a su primo, acababa de perder a Macao, sin embargo, aquí seguía, queriendo ponerse a sí mismo como carnada para salvar al hermano y al cuñado de Kinn. Vegas sonrió, tratando de parecer fuerte, cuando en realidad, sólo quería esconderse cual cachorro asustado.

— ¿Vegas?

— Estoy bien, hagamos esto. Quizás no pude salvar a mi hermano, pero puedo salvar al tuyo, y al tuyo -primero miró a Kinn y luego a Porsche-

— Vegas -Porsche se acercó- cuando todo esto termine, iremos a buscar a Macao, quizás sólo fue el sonido de las balas a distancia.

— No, Porsche. Escuché como abrían esa puerta, mi hermano ya no está.

Porsche envolvió en sus brazos al menor, de la misma forma en que lo hacía cuando Chay era un niño pequeño y buscaba abrazos a todas horas. Vegas dejó salir un suspiro y luego de unos minutos se alejó, ya faltaba poco para que la hora acordada llegara y aún tenían mucho por planear.

— No entregaremos a Vegas. Ya lo hablamos y quiero que Kinn escuche y nos diga si eso sería una buena opción.

Kinn asintió y todos se sentaron en las sillas disponibles. Pete les dio a conocer parte del plan, pero necesitaban darle más seguridad. Después de que Vegas ingresara, debían pensar en lo que Big, Ken, Arm, Pol y Pete, harían para sacarlo. Los mencionados se acercaron y recibieron las instrucciones de Kinn, una vez Kim y Porchay estuvieran a salvo, ellos entrarían y sacarían a Vegas, a como de lugar.