CAPÍTULO VI

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Narra Itsuki.

Despierto con un fuerte dolor de cabeza, me siento y trato de orientarme. Estoy en el sofá de una oficina.

- Despertaste.

Miro a la fuente de esa voz.

- Tú... - no podía creerlo.

- Tienes buena resistencia para tener 17 años. Sin embargo, tu hermano mayor me dio algo un poco más de trabajo. - su rostro no expresaba nada.

- ¿Qué es lo que quieres de mí?

- De ti nada. Solo eres la carnada. Ella llegará y entonces empezará la guerra.

Empiezo a entender.

- ¿Por qué específicamente a ella?

- Porque es especial.

- ¿En qué manera?

- ¿Nunca te preguntaste por qué es tan fuerte?

- Su arduo entrenamiento.

- Puede ser. Pero la fuerza que demuestra no es ni el 20% de su verdadero poder.

¿De verdad Hayami es más fuerte de lo que todos creen?

Se acerca a mí.

- Te lo puedo decir si a cambio, me ayudas a convencerla de tenerla en mi lado.

Claro que no podía hacerle esto a mi hermana, pero quiero averiguar que es lo que este hombre sabe que nosotros, ni siquiera Hayami, sabemos.

- Te escucho.

- Hayami fue abandonada junto con su gemelo unos días después de que nacieron porque sus padres biológicos sabían que uno de sus hijos había nacido con un don poderoso de extraer la energía recibida y regresarla 100 veces más fuerte. Lo hicieron con tal de ''protegerlos'', ¿pero de qué?, ¿de la verdad? Tenían miedo de lo que podían llegar a ser realmente, para lo que fueron creados. Conquistadores. Viví una situación similar en la que me ocultaron la verdad. Somos más parecidos de lo que ella cree, merecemos tener el mundo a nuestros pies. Los superiores debemos ser conspicuos a los inferiores, es nuestro legado. ¿Lo entiendes no?

Asiento de forma apócrifa.

- Si aceptas estar con nosotros, no te haremos daño.

- ¿Qué pasa con mi familia?

- Hay que hacer los sacrificios que sean necesarios.

Es un desalmado sin duda.

- Considéralo, pero no es eviterna esta elección.

Se marcha de la oficina dejándome preocupado de lo que podría ser capaz de conseguir su objetivo.


Narra Hayami.

Adrenalina.

Enojo.

Determinación.

Preocupación.

Son las emociones que logro identificar circulando en mi interior en este momento.

Llegando a las puertas de la base de La Orden varios Caballeros de mayor rango junto con el capitán Aldrich están en sus caballos y se dirigen a nosotros.

- Hemos recibido la noticia de una nueva posible amenaza a nuestros pueblos. Escuché también el secuestro de su hermanastro, Kyo y Hayami. No se preocupen enfrentaremos a lo que sea para salvarlo. - nos dice el capitán.

Asentimos decididos.

- Con base a mi información se dirigieron a la base de La Armada. Por cierto, el niño rescatado fue puesto a salvo por Joseph, por suerte estaba con él cuando sucedió este alboroto. - la noticia del capitán me alivia, saber que Nathan está bien me tranquiliza un poco.

La Orden de los Caballeros DiáfanosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora