cap.29: ¿en que coño nos metimos?

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La manada seguía a la chica, que solo caminaba en silencio, hasta que se detuvo, miró a su alrededor y luego soltó un pequeño silbido.

Malia se iba quejar, pero escucho algo moverse y se escondió junto con la manada.

- pero miren la flor es libre- se burlo.
- ¿donde es la nueva T.B?- cuestiono sin interés.
- ay que fría- se burlo, pata luego acercarse- hay una a dos pueblos de aquí al sur, ¿qué planeas?-
- nada interesante.
- el beta del alfa McCall- dijo tranquilo- tendrás que ir rápido, tu y yo sabemos lo que le hacen a miembros de manada conocidas, tendrás que moverte rápido antes que algo le pase- dijo para irse.

Tenían la información, irían.

Nadie cuestiono nada, menos cuando vieron a la chica guardar cuchillos en sus botas.

Lo que les puso los pelos de punta fue las palabras de la chica, "este es el mundo donde algunos vivimos".

Una vez todos llegaron a una mansión enorme, dejando sorprendidos a muchos.

Agradeciendo haber investigado con ayuda de Chris, sobre en donde sería específicamente.

Llegaron al lugar, vieron todo desde lejos fijándose como entrar.

Entrarían por la ventilación, otros se harían pasar por compradores, mientras que el resto esperaba afuera por si necesitaban algo.

Scott, Derek, Malia, Stiles y Theo fueron junto con la menor por la ventilación, Isaac, Liam, Gabriela entraron a la "fiesta".
Los demás estaban afuera.

Una vez entraron a la zona donde estaba la mercadería, vieron lo más inhumano.
Stiles solo se tapo la boca por el horror, Malia soltó un ligero gruñido, al igual que Theo, Scott solo dio bocanada de aire sentía que le faltaba, Derek quería vomitar.

- ¿que mierda haces aquí?- fue la voz media muerta de alguien, que asusto a todos.
- vengo en busca de un cachorro, 03- dijo la chica apuntando la Linterna a una mujer de pelo mal cortado y color rojizo.
- ¿estas embarazada?- fue la voz de Malia.
- así es niña- hablo sin vida, tocando con dificultad su abdomen de ocho meses.
- el sexto- murmuró Zoey.
- eso fue cuando te fuiste Zoey, tu solo tenias cinco cuando te compro otra trata- dijo la mujer, no pasaba ser más de seis o siete años más grande que la menor.

Stiles quería llorar, en pensar que esa niña estaba embaraza  en un lugar que apestaba a muerte.

- Zoey, eres libre. Aléjate de aquí, no vuelvas- murmuró para acurrucarse en su lugar- si ellos ven que creciste, te usarán para dar a Luz a la próxima mercancía, corre lejos pequeña- le dijo estirando su mano.

Scott fue el que trato de tocarla, pero esta retrocedió, su mirada de miedo y asco, lo estaba rompiendo.

Zoey solo miro a la mujer y froto su cara, empezando a caminar, los gritos de mujeres pidiendo que los saquen de ahí o que salve a sus hijos, hombres abrazando cadáveres pidiendo ayuda, todos tenían cadenas, en los tobillos, muñecas y garganta.

La niña se detuvo frete a una puerta que tenía un sonajero en la puerta.

- si no pudieron con lo que vieron, les digo que no avancen- dijo con la voz entre cortada tratando de no llorar.
- entraremos contigo- dijo Scott poniendo una mano en el hombro de la menor.

Stiles sabia forzar las cerraduras, así que fue ella quien abrió esa puerta.

Al entrar vieron pequeñas jaulas, amontonadas una arriba de otras, podían ver niños que rondaba los dos años, hasta los doce.

Malia solo pudo maldecir.

- ¡por favor, prometo no volver a llorar, pero salva al bebé!- la voz histérica que salía de una de las jaulas destruyó, Stiles no dudo en correr a donde el pequeño que grito.

Mujeres por errorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora