Mentiras y verdades

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— mis hijos siempre han sido chicos fuertes, jamás se rinden con facilidad —hablaba splinter

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— mis hijos siempre han sido chicos fuertes, jamás se rinden con facilidad —hablaba splinter. Ya tenía un par de minutos hablando sobre su familia y como habían conocido a _____— y ______ es igual, supongo que tú más que nadie lo sabe, ella siempre a sido alguien determinada

— si..siempre fue así hasta lo de su despido —admitió la azabache mientras terminaba de vendar un brazo de la rata— prácticamente su mundo se derrumbó, se alejó de mi..—confesó algo decaída

— no sabía eso —hablo splinter después de guardar silencio— solo se que ella siguió con su vida siendo mesera

— bueno, ella se alejó de todo el mundo, era raro que nos viéramos —suspiro pesado— creo que el haber tenido esa situación con Jacob la hirió mucho —miro a la rata

— y lo peor de todo es que lo afronto sola —respondió con voz débil, su respiración era lenta y pausada, después de todo aún seguía adolorido por la pelea con destructor— pero en fin, ahora se que mis hijos estarán para ella, en especial Leonardo —sonrió un poco viendo cómo está empezaba a guardar las cosas que había usado para curarlo, aunque ella al oír ese nombre lo volvió a ver con atencion

— ¿Leonardo? —preguntó confundida, parando de guardar las cosas y poner aún más atención

— si, el esta enamoradisimo de ella —habló de forma tranquila— deberías escuchar como la describe, cada que habla de ella sus ojos se iluminan como si hablara de un mismo ángel —mencionó nuevamente— la admira mucho

— wow...no había oído nada sobre un tal Leonardo —admitió Ester tomando el control remoto y encender la televisión— cuénteme más —pidio sonriendo

— con gusto —dijo para seguido comenzar a hablar sobre cómo había iniciado tu historia de amor con el líder, para el, era lo mejor, estaba feliz y orgulloso de que al menos uno de sus hijos pudiera experimentar lo que era el amor

— con gusto —dijo para seguido comenzar a hablar sobre cómo había iniciado tu historia de amor con el líder, para el, era lo mejor, estaba feliz y orgulloso de que al menos uno de sus hijos pudiera experimentar lo que era el amor

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Después de una enorme persecución en la nieve, después de que casi murieran en un precipicio, los chicos habían logrado llegar a tiempo a la ciudad, habían llegado al mismo edificio donde se encontraban destructor y Erick sacks.

soy doctora...NO VETERINARIA! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora