Jeon HaRim: Growing Pains (COMPLETA)

Capítulo 5

Estoy en medio de mis padres mientras nos encontramos sentados en la arena, no estoy contenta de contarles esto, aunque al mismo tiempo siento ansiedad porque lo sepan, aclaro mi garganta mirando al horizonte del mar.

—Recuerdan a JiSung, ¿Verdad?

—¿El chico que te besó? —obviamente papá lo recordaría.

—Sí.

—Me habías dicho que ya no estaban juntos—mamá me mira— ¿Volvieron?

—Sí, habíamos terminado por algunas dificultades que atravesaba con el divorcio de sus padres—coloco algunos mechones de mi cabello detrás de mis orejas—Volvimos por escaso tiempo.

—¿Ya no están juntos?

Aquí venía la parte mala.

—JiSung estaba teniendo problemas con el alcohol—evalúo la reacción de ambos. Mamá parece sorprendida mientras que papá está serio—Con el divorcio de sus padres comencé a encontrar cicatrices en sus muñecas, allí descubrí también que comenzó a lastimarse así mismo con tantos problemas.

—¿Sus padres lo saben?

—Ahora sí.

—Hablas de él en pasado—nota papá—La historia no tiene un buen final, ¿No?

Muerdo mi labio sintiendo el nudo en la garganta hacerse fuerte. Intento distraerme jugando con la arena sin tener éxito.

—JiSung se suicidó hace tres meses—mi voz se vuelve temblorosa—En la escuela nunca dijeron nada de esto y...una tarde luego de clases fui a su casa—las primeras lágrimas silenciosas caen—Sus padres estaban juntos, me pareció extraño, fue entonces que me dieron la noticia. Por eso en toda la semana no respondió los mensajes ni las llamadas.

—Lo siento mucho, cielo—y apenas mamá toca mi espalda sollozo. Me abraza besando mi cabeza—No teníamos idea de esto.

Por unos minutos no puedo decir nada, las lágrimas no me dejan, papá se une al abrazo apretándonos entre sus brazos. Retener por tanto tiempo lo que sentía no fue buena idea, detener el llanto se me hace muy complicado, ambos esperan que logre calmarme, toman mis manos apretándolas con suavidad.

—Pensé que...podría ayudarlo como mamá hizo contigo—señalo a papá—Tenía la esperanza de ser su salvación tal como pasó con ustedes—niego con la cabeza—Sentía tanta envidia cuando los veía juntos, quería algo así y era imposible no pensar en él—sollozo—Fue mi culpa, no pude salvarlo a tiempo.

—¿Sabes quién se echaba la culpa constantemente cuando todo se tornaba difícil? —miro a papá. Limpia mis mejillas sonriéndome un poco—Yo lo hice mucho tiempo, me decía que era mi culpa que tu madre saliera lastimada todo el tiempo.

—Y yo me preguntaba si realmente podría sacarlo de todo eso—volteo a ver a mamá—HaRim, ninguna relación es igual a otra, puede ser similar, pero nunca será igual.

—Hiciste lo que pudiste para salvar a ese chico—una vez más vuelvo a sollozar—Mírame—toma mi barbilla— ¿Recuerdas lo que te dije sobre tu abuela HaRim?

—Dijeron que me llamaron como ella en su honor.

—Tu abuela vivió mucho tiempo intentando salvar a un hombre que no quiso ser salvado, eso la afectó mucho y cuando quiso recuperarse ya era muy tarde—susurra—Hay cosas que suceden porque sí, no importa cuanto lo intentemos, hay cosas que no pueden cambiarse.

—JiSung no debía morir.

—Y no digo lo contrario, sólo quiero que entiendas que vivir con ese dolor y esa culpa no es justo, mucho menos si hiciste tu mejor esfuerzo por cambiarlo—besa mi frente abrazándome—Lamento que hayas tenido que aguantar esto por tres meses.

—Lamento haber sido grosera con ustedes. Estaba tan molesta con todo—las tontas lágrimas mojan la camisa de papá—Lo siento.

—Nunca pienses que tu madre o yo te daremos la espalda. Somos tus padres y te apoyaremos en todo, ¿Entiendes? —asiento—Te amamos mucho—susurra en mi oído.

Mamá deposita un beso en mi mejilla haciéndome sentir más pequeña, amo a estos dos seres y agradezco que sean mis padres. Ellos pasaron por mucho, hacen su mejor esfuerzo por ser los padres que necesito, mi actitud no debe repetirse.

Ellos merecen tener una buena hija.

...

—HaRim es muy fuerte—escucho la voz de papá a lo lejos. Quiero abrir los ojos, pero no consigo hacerlo, puedo escuchar las olas del mar todavía, es un bonito fondo.

—Ella es exactamente como tú—dice mamá—Me recordó a cuando también solías soportar tus cargas incluso si eran muy pesadas.

—Creo que por eso temo tanto por ella—escucho un suspiro de su parte seguido de una caricia en mi cabello—A veces temo que HaRim caiga en una de las muchas tentaciones en el mundo.

—Mi madre suele decir que incluso cuando los niños reciben una excelente educación o enseñanza, tienen la obligación de cometer errores y aprender de ellos—sonrío internamente porque es cierto, he escuchado a la abuela decirlo—HaRim tiene derecho a experimentar, nosotros sólo podemos ser su guía.

—Hubiera preferido que se quedara pequeña. Siempre recuerdo cuando la vi por primera vez en el hospital, era tan pequeña que temía lastimarla.

—Y lloraba cuando la cargabas.

—Recuerdo cuando la llevé al trabajo, fue un caos, no me dejaba enfocarme—la voz de papá se vuelve nostálgica—SoHee, ¿Crees que estamos haciendo un buen trabajo como sus padres?

—Estamos intentándolo, eso es importante.