Llegue a mi casa y subi, no me animaba contarle a los chicos lo que habia pasado con Otamendi.
Estaban por ser las doce y me hermano entra a mi habitación.
-¿Venis asi le cantamos el feliz cumpleaños a Enzo?-. Me pregunto y asentí.
Bajamos y cuando el reloj marco las doce empezamos a cantarle el feliz cumpleaños.
Mi cuerpo decía que lo abracé y eso hice, Enzo siempre me hizo sentir segura y ahora mismo después de todo solo queria un abrazo suyo.
Sonrio y despues me separé.
-Feliz cumple Enzo-. Le digo intentado hacer una sonrisa.
Ellos se quedaron boludean abajo y yo me fui a dormir porque andaba cansada.
A la mañana cuando me levante no estaba Enzo, ya se había ido, con Juli hoy teníamos el cumple de Enzo, por una parte queria ir pero no me queria ver con Otamendi.
-Buen dia Delfi-. Me dijo Juli.
-Buen dia Juli ¿Hay algo para comer?-. Asintió y me dio unas galletitas.
-Enzo ayer estaba pensando como hacer para no verte empalagosa con Otamendi-. Dijo riéndose, ni en pedo iba a estar empalagosa con el.
Solo le respondí con una sonrisa y volvi a subir.
Mi dia fue aburrido hasta que a las siete me empecé a preparar para lo de Enzo.
Tocan la puerta de mi pieza y abro.
-Delfi ¿no le podrías decir a Otamendi si nos lleva que se rompió algo del auto?-. Asentí, la verdad que ni queria decirle.
Parecía que la vida me estaba odiando.
Agarre el teléfono y me dirigí al chat con Nico.
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Le clave el visto a los ultimos dos mensajes, no sabi si queria hablar con el despues de todo, ya por noticias me habia dado cuenta que me estaba siendo infiel y que ahora me trate mal, eso no iba conmigo.
Me termine de arreglar, me habia vestido algo tranqui pero tampoco tan tranqui.
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