capítulo 10

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Dios mío, vuelvo a retomar mis oraciones, perdona el no haber puesto mi voluntad antes al hacerlo, puedo tener tiempo en limpiar mi alma ahora- decía este mientras se encontraba de rodillas al borde de una ventana- Jungkook y yo hemos estado destruidos, creo que es el momento de poder reconstruirmos nuevamente, si es así mi señor, bendicenos. Amén.

No tienes que hacer eso, pequeño- Habló Jungkook recostado en el marco de la puerta con los brazos cruzados.- Creí que no te gustaba hacer eso.

No es algo que me emocioné hacer, simplemente hoy me nació hacerlo -respondió levantándose del suelo-

Ven aquí, pequeño- lo llamo y rápidamente ese asintió sentándose en el regazo ajeno- Tengo que ir por algunas cosas ¿podrás quedarte hoy?

El castaño asintió y rápidamente Jungkook se levantó agarrando sus cosas y saliendo de la casa, no sin antes despedirse de su pequeño con un beso en la frente de este.

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Señor Kim, ¿qué lo trae por aquí? ¿no deberia estar en la Iglesia?- cuestionó Doyun, uno de los proveedores de alimentos más importantes de aquella zona.

Estoy preocupado por mi familia Doyun, no se nada acercade mi hijo hace una semana- SeoJoon escuchaba angustiado e incluso se lo veía agotado- le pido a Dios todas las noches pero...- este no logró terminar ya que fue interrumpido-

¿Qué está diciendo,señor Kim? Siempre veo a su hijo y parece estar completamente bien- comentó Doyun.

¿Qué?,¿qué estas diciendo?- preguntó desconcertado ante las palabras de aquel sujeto.

Viene aquí muy seguido, en especial con aquel muchacho - indicó a un hombre de cabellera negra que llevaba una camisa blanca- me sorprende que hoy no viniera con él.

Pero...- el hombre estaba atónito en el lugar al ver en manos de quien estaba su hijo.

Yo no quisiera alarmarlo señor Kim, se que usted es un hombre de principio y se la excelente familia que tiene usted pero....

¿pero que? Dímelo ya, Doyun -exclamó con cierta desesperación en el tono de sus palabras.

Varía gente en el pueblo que los ve juntos murmullan...que no tienen una relación de amistad, que tienen algo más que eso ¿me comprende?- cuestionó este, al ver lo pasmado que había quedado , decidió hablar rápidamente- pero las malas lenguas suelen hablar de más, señor Kim. Quizas ni sea cierto.

SeoJoon volvió a posar su mirada sobre Jungkook, ese soltó un fuerte suspiro de furia.

Después de tantos años se atrevió a meterse con su familia nuevamente.

-
Taehyung se había quedado sólo en la casa, Jungkook dijo que no iba a tardarse pero los minutos que pasaban ya parecían eternos.

Sin embargo, nunca tuvo la oportunidad de conocer mejor la casa de este.
Había entrado muy pocas veces cuando era un niño aún era nostálgico para el.

Fue de habitación en habitación, bajando y subiendo, la casa estuvo años sin ser habitada por nadie , varias partes de la casa ni siquiera tenían el mínimo arreglos o luces como en la parte delantera de la casa.

Parecía haber sido todo, cuando lo recordó.

La casa también tenía un sótano.

Solían jugar con Jungkook cuando eran unos niños, lo transformaron en un rincón , pensaba que ahora no debe ni quedar los garabatos con los cuales tapizaban la pared, debido a que ese lugar ya debía estar cubierto de humedad.

Cerca de las escaleras se encontraba una puerta que dirigía hacia el sótano, Taehyung agarró la perilla para poder abrirla. Sin embargo, parecía que está estaba cerrada con llave.

𝐟𝐨𝐫𝐛𝐢𝐝𝐝𝐞𝐧 || 𝚝𝚊𝚎𝚔𝚘𝚘𝚔 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora