Te Vi Venir

Capítulo 8

¡Hola chicas! ¿Cómo están?

Wow... Les quiero agradecer a cada una de ustedes por el apoyo que le están dando a la historia. La app la está recomendado en las etiquetas y es por ustedes. ¡GRACIAS! gracias por el apoyo, por sus votos y comentarios que lo hacen posible.

La verdad es que siempre tuve dudas de escribir está historia, incluso he tenido dudas de seguirla por lo que a veces llega a mi mente. Jejeje.

PERO...

¡Claro que la seguiré! Ustedes me animan y se lo merecen. 

¡AMO LEER SUS COMENTARIOS!❤️‍🩹😭♥️.

¡Casi se me olvida! Las chicas que me han preguntado por el grupo de WHATSAPP el grupo aún está, pero no es tan activo como lo fue en el pasado, así que por ello no les he dado respuesta.

Pero... Si aún así quieren ser parte de él solo escríbanme o déjenlo saber en los comentarios.

Ángel Black

Paso la esponja por mí cuerpo.

Mi mente rememora cada una de las expresiones de su rostro. En la forma en las que sus delicadas facciones se transformaban en las pruebas de placer jamás vistas.

Mis oídos aún oyen a sus gemidos, jadeos, exclamaciones.

«—No Ángel, no... Solo olvidemos esto.»

Chloe está equivocada si piensa que esto solo acabó.

Exclamo cerrando los ojos cuando el agua fría cae en mí cuerpo, pero no es eso lo que me hace cerrar mis manos hasta volverlas puño.

Es su mirada, la mirada de arrepentimiento que ví en sus lindos ojos claros.

¡Maldición!

Ella los disfrutó, yo lo sé. Sus facciones se desfiguraron en placer, sus gemidos lo confirmaban a cada nada cuando remetía contra ella. ¿Por qué decir que está arrepentida?

Yo no estoy arrepentido, jamás lo estaría. Estaba, estoy y estaré seguro siempre de lo que hice con ella, quería hacerlo.

Su sensualidad me vuelve loco. Su osadía me descolocó y su manera de entregarse sin pena alguna me vuelve a poner duro.

Capaz no sea lo justo y no debería hacerlo, pero ¿Cómo no comparar?

Chloe se entregó a mí, así, sin tabúes, sin prejuicios, sin penas y por mis antepasados que el brillo de perversidad en sus ojos solo me hacen volver a ella y querer descubrir la lujuria en ella.