Sobre golpear a dioses y padres ausentes

Capítulo 47 : Yule en la Madriguera

Resumen:

Loki tiene muchos planes geniales para la primera Navidad familiar de su hijo. Primero es hora de celebrar Yule con los Weasley.
¿Qué podría salir mal?

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Asgard en realidad nunca había celebrado la Navidad.

Esto no debería ser tan sorprendente. La Navidad como festividad era mucho más joven que la mayoría de los dioses adultos y se basaba en la idea de un semidiós salvando el mundo. Hasta hace muy poco, los semidioses no eran algo que valiera la pena celebrar.

Pero ahora Asgard tenía un semidiós y estaba profetizado para salvar el mundo.

Entonces, la mayoría de la gente estaba más que dispuesta a entrar en el espíritu de las cosas, incluso si era un poco sacrílego.

Al ver que el único asgardiano que alguna vez celebró la festividad fue Loki, le correspondió a él educar a las masas sobre cuál era la versión secular de la festividad y cómo se suponía que la gente debía celebrarla. Había algunas cosas, como los villancicos, que Loki estaba más que feliz de dejar en la tierra. Pero sí describió las medias y el árbol y los diversos dulces y golosinas. Les habló de la tradición midgardiana de irse a dormir y despertarse por la mañana para recibir regalos unos de otros, envueltos en cobertores brillantes. Una muestra de amor y apoyo hacia una familia.

Eso había sido bien recibido y había muchas casas en la ciudad real que estaban adornadas con las decoraciones adecuadas. Bueno, tan cerca de lo correcto como los asgardianos podían manejar. Loki les contaría sobre el muérdago, una planta venenosa que los humanos colgaban en sus casas durante las vacaciones. Cuando dos personas se paraban debajo de él, tenían que intercambiar un beso. Esto de alguna manera se invirtió para que los asgardianos colgaran ramas de los arbustos de bayas y se golpearan entre sí con gran abandono en el brazo cada vez que dos de ellos se paraban debajo.

Entonces, la Navidad en Asgard iba a ser genial.

El propio Loki se había centrado en asegurarse de que el palacio estuviera bien arreglado. Había ido con Sirius y Remus y había cortado un gran árbol en Midgard y luego lo había transportado cuidadosamente de regreso a Asgard. Remus había insistido en poner hechizos en el árbol para que no muriera y pudiera ser devuelto a su tocón y sanado después de que terminaran. Loki solo agregó algunos hechizos para asegurarse de que no arrojara agujas por todas partes y que despidiera el agradable aroma a savia de pino que tanto le gustaba.

Sabía por su tiempo con Lily que ella prefería decorar el árbol en familia. Así que Loki reunió todas las decoraciones necesarias y les dijo a Odín, Frigga y Thor que es mejor que se preparen para dedicar una noche entera a esta experiencia. Le advirtió a Odin específicamente que si se lo perdía o traía algún trabajo con él mientras lo hacía, Loki lo haría sufrir por ello. Loki luego decoró el resto del ala real del palacio como era apropiado para la visita de Harry.

Se había decidido que la Navidad se celebraría en tres etapas. La primera etapa fue, por supuesto, los Weasley. Loki, como James, iría con Harry a La Madriguera. Pasarían unos días con la familia pelirroja, intercambiando algunos regalos temprano y, en general, siendo lo más domésticos y tontos posible. Loki sabía muy bien que los gemelos tenían muchos planes. Por supuesto, habría tradiciones más mágicas para Yule que celebrarían.

Después de eso, Harry y Loki se dirigirían a Asgard donde Thor y el resto los estarían esperando. Luego pasarían un tiempo allí, Loki planeaba incluir tantas de las tradiciones familiares que él y Lily habían querido para su hijo en este momento. Sabía que podría doler un poco ver algo de eso, hacerlo sin Lily, pero su hijo merecía tener la experiencia completa. Cada pedacito de eso. Intercambiarían regalos allí de nuevo y también tendrían un festín porque ningún día festivo en Asgard se pasaba sin uno y Loki no se sorprendería si hubiera más regalos para su hijo en ese momento.