Jiang Cheng siempre se ha sentido a la sombra de su hermano adoptivo. Ambos son patinadores que acaban de debutar en la categoría senior. Un día, mientras patina en busca de consuelo, es observado por Lan Xichen, quien es su ídolo en el patinaje y s...
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Diciembre 11 era la fecha establecida por la ISU para el Grand Prix Final, por lo que los cinco mejores patinadores del mundo deberían asistir. Este año se celebraría en París, Francia. Por lo cual, Wei Ying estaba totalmente animado por recorrer los paisajes románticos de París junto a su novio americano. Así que había marcado un recorrido completo que le gustaría recorrer a su lado. Huaisang, quien había visitado París varias veces, le estaba ayudando a armar su itinerario. Aunque Jiang Cheng aparentaba estar aburrido por la pérdida de tiempo de esos dos, lo cierto es que le gustaría recorrer esos lugares con Xichen.
En sus dos últimos viajes juntos hicieron turismo, pudieron sentirse como una pareja normal disfrutando de su tiempo juntos. Pero esta vez sería diferente. Wei Ying también asistiría, pues era uno de los clasificados en el Grand Prix Final; por lo que, su madre también viajaría como su entrenadora. Por si fuera poco, su padre también iría pues era el evento central del mundo del patinaje. Todos los fans y medios especializados también estarían presentes. Tener cualquier muestra de afecto era riesgoso. Lo único que sabían y habían consentido sus padres era la presentación conjunta en la Gala, pues se lo plantearon como un homenaje de alumno a maestro, en el cual el maestro le entrega su herencia a su discípulo.
"Al menos podré patinar con Xichen en la gala", pensó el joven omega.
Afortunadamente, para su celo todavía quedaba varios meses. Aunque, incluso si llegara, este era el tipo de evento en que se tomaban supresores que anulaban por completo el celo. Su hermano tomaría uno, su celo sería en la veintena de diciembre, pero era mejor prevenir los síntomas pre-celo. Ese era otro detalle que no pudo evitar admirar a su hermano. El año pasado su celo había coincidido con el Grand Prix, eso no le detuvo de ganar el segundo lugar. A pesar de no desmerecer a los otros finalistas, estaba seguro que su mayor rival era Wei Ying.
Los días avanzaron en medio de prácticas y estudio. Aún faltaban meses para el gaokao, el examen nacional para obtener un ingreso a la universidad, pero Jiang Chen sabía que necesitaba esforzarse para aprobarlo a la primera. No le había dicho a sus padres ni a Xichen sobre su decisión, pero lo haría cuando terminara la temporada. Estaba agotado, apenas podía mover sus piernas. Llegó a su habitación, olfateó el aroma de su madre ahí. Casi se le sale el alma cuando vio a su madre con una caja alargada en su mano. Soltó su mochila, se adelantó y la tomó.
"¡El maldito consolador que me regaló Wei Ying!"
—Es para mi celo...algunos dicen que es más fácil...— Intentó explicar, titubeante.
Apretó la caja con el consolador contra su pecho. En realidad, no debería de ser malo que un omega de su edad tuviera algo semejante, después de todo, tenían que lidiar con los celos, pero su conciencia lo asoció a su relación con Xichen de inmediato.
—¡Fue un regalo de Wei Ying! —Terminó acusándolo de inmediato.
—Ese mocoso...—Soltó Madam Yu. Al ver a su hijo tenso, se contuvo de continuar. No era bueno poner nervioso a Jiang Cheng antes de la competencia. —Bueno, en realidad, no hay nada de malo. No estoy rebuscando tus cosas. — Aclaró. —Solo que no has sacado la ropa sucia de tu anterior viaje, salvo los trajes. Hay que empezar a empacar. Ya quedan pocos días. Tus trajes de patinaje ya están listos.
