Loto Cristalizado

Capítulo 1: Un nuevo renacer

Siempre perdía ante una sola persona: Wei Wuxian, su hermano adoptivo. Desde que tenía recuerdos en el hielo, Wei Ying se destacó. Era travieso, entrenaba menos que otros, jugueteaba y fastidiaba a todos a su alrededor, pero sobre el hielo podía conmover a su gusto, haciendo que las miradas de todos no pudieran girar hacia otro lado, incluso él, se quedaba sin aliento cuando lo veía patinar. Para una persona como su hermano solo existía una palabra que lo describía: prodigio.

A él también le gustaba patinar, le encantaba deslizarse sobre el hielo, pero para ganar no podía limitarse a simplemente a bailar sobre él. Había reglas que cumplir, un programa que sumaba puntos, un ganador y un perdedor. Su casa tenía un lugar especial para los trofeos de todos. Los de Jiang Cheng eran de un deslumbrante tono plateado. Solo cuando participaba en una competencia donde su hermano no lo hiciera es que lograba tener el oro. Pero, eran muy pocas las ocasiones ya que pertenecían a la misma categoría casi tenían la misma edad y la misma disciplina. Ambos omegas, ambos de la misma familia y de la misma entrenadora.

En ese instante finalmente le había salido los cuádruples que quería. Ese año intentaría sumar cinco cuádruples en su programa largo para superar a su hermano que solo tendría cuatro, pero eso no parecía quitarle el sueño a Wei Wuxian. Madam Yu siempre lo castigaba, pero Jiang Cheng sabía que todas las esperanzas de su madre estaban puestas en él. No importaba que solo tuviera cuatro cuádruples, Wei Wuxian era tan conmovedor en su interpretación que podía sumar suficiente puntaje en el plano artístico.

Cansado de torturarse así mismo, Jiang Cheng comenzó a deslizarse por la pista de hielo. Solo con una pista en su cabeza, dejando que su cuerpo se mueva solo, dibujando formas armoniosas y elegantes. Dio un salto y cayó perfecto y hermoso. Cuando iba a dar otro salto recordó lo que uno de los locutores dijo en la televisión: "Sin duda es un programa arriesgado, debe ser evidente que el chico está desesperado por superar a su hermano prodigio ¿Lo logrará o se estrellará contra el hielo?" Perdió el equilibrio y terminó cayendo al hielo, estrellándose cruelmente.

Aturdido por el golpe, sintió una presencia y unos pasos deslizarse por el hielo.

—Déjame ayudarte.

Simplemente tomó esa mano. Esta persona, con una asombrosa facilidad, le levantó del hielo. Quedó de pie y se encontró con la mirada de una persona de ojos marrones, aunque si los mirabas bien eran como dorados oscuros. Al darse cuenta de quien se trataba se separó de él. Había olvidado que esta pista era solicitada por diferentes patinadores y entrenadores.

—¿Terminó mi turno? —Preguntó incómodo.

—No. Solo estaba calentando y te vi. Realmente hermoso ¿será tu próxima rutina?

Jiang Cheng se sonrojó levemente. El hombre frente a él era un alfa muy conocido en el mundo del patinaje. De hecho, Wei Ying y él miraban sus competencias cuando eran pequeños. Tenía veintidós años y había ganado muchas competencias. Solo que, intempestivamente, hace dos años anunció su retiro y que iba dedicarse a entrenar a su hermano menor y otros patinadores. Se armaron miles de chismes al respecto, algunos patinadores comentaban que realmente hizo algo imperdonable. Otros que simplemente tenía miedo a su propio hermano menor que justo subiría al nivel senior.

—En realidad no. La que haré es otra. —Terminó por decir. Su corazón latía acelerado al verlo.

—Me gustaría verla ¿Se puede?

Sintió que sus mejillas se coloreaban fácilmente. Era un alfa bastante atractivo. Se preguntaba cómo sería su aroma. Estaba prohibido, bajo reglamento, en todos los deportes usar los aromas y feromonas; así que ningún atleta podía usarlos. Si un omega los usara convencería fácilmente a un jurado beta de darle el puntaje máximo. Así que los atletas usaban medicamentos permitidos para controlar y contener sus celos y para eliminar sus aromas. Xichen había tenido éxito como entrenador, además de su hermano a quien co-entrenaba junto a su tío, logró que dos de sus discípulos dieran un giro a sus carreras de la mediocridad al éxito. Asimismo, había diseñado rutinas efervescentes a dos patinadores de patinaje en pareja recibiendo buenas críticas.