cuatro: primer amor.

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Al principio, lo veía como sólo un hermano.

Un compañero de juegos, alguien con quién hacer bromas y luego reírse de ellas, con quién podía soportar los regaños y hacer las tareas, también con quién podía llorar cuándo extrañaba esa vida "normal" qué dejó para ir tras su sueño pero, con el paso del tiempo, aún con las hormonas alborotadas, malinterpretó esas acciones y acabó perdidamente enamorado de su compañero de grupo, de su amigo, de su hermano.

Se sintió cómo estar al borde de un precipicio, venía de una familia conservadora, fue cómo darse cuenta de que tenía una enfermedad terminal, se separó de él y se hundió en una extraña depresión. Era gay, una aberración formada por un ente demoníaco para hacer caer a los débiles y llevarlos al infierno.

Jodidamente lo merecía.

Era joven, y estaba tan asustado, que se vio atrapado entre la espada y la pared, no sabía qué hacer, se sentía al borde de un colapso, simplemente no podía ser gay, debía ser hetero, como Dios manda y se espera que sus creaciones recreen, la ley de vida era procrear, y ser gay y querer que se la metan era malo. Tan malo que moriría entre las llamaradas del infierno.

Desesperado no pudo soportar más y se vió obligado a buscar ayuda, a una noona del staff, obviamente no iba a decirle a un miembro del grupo, no quería que lo vieran con asco, así que un día cómo cualquier otro, que había acabado más tarde que los demás le preguntó sí era una aberración ser gay, estaba nervioso, con los ojos llorosos y su cuerpo tembloroso. La respuesta le dejó frío, casi mudo, y no supo qué decir, durmiendo con la duda en la cabeza.

-¿Una aberración?, ¿Quién te ha dicho eso Koo?

-D-Dios d-dice qu-que...

-Dios dice que nos ama a todos por igual, él creo personas distintas, un mundo diverso, somos tan diferentes como iguales. La variedad nos hace seres vivos, y ser gay no es aberración, es una forma de amar como todas las que existen y... Sí lo dices por ti, eres una gran persona Koo, sin importar que seas o no seas gay.

Entonces... ¿No estaba enfermo?

Los pensamientos y los nervios se lo comieron vivo, poco a poco comenzó a destruir su estabilidad mental, se sentía al borde de la locura y las cosas terminaron por desestabilizarse cuándo, en el 2015, TaeHyung le presentó a su primera novia oficial, lo quería gritar a los cuatro vientos, estaba orgulloso de esa chica que conoció en un concierto, no era una fan, pero sí se acercó por curiosidad.

Era hermosa, se llamaba Junnie, simplemente perfecta, era mayor que él por un año, y era tan amigable que se le fue difícil caerle mal, sintió como su corazón se rompió a pedazos y sin una explicación alguna lloró en los brazos de TaeHyung, esa misma noche, quién le consoló sin obligarlo a darle una razón, pero tan pronto se durmió se escapó del apartamento del grupo, y lo dejó solo, con un vacío que no pudo ser rellenado.

Después de ella llegaron Chaennie, Momo, Jini y un sinfín de chicas más, todas eran el amor de su vida, todas le quitaron la atención de su mejor amigo, todas le provocaron que su mundo se viniera abajo, se sumió a una depresión silenciosa, odiaba ser homosexual, el haberse enamorado de alguien que ya no lo quería y también, no poder aceptarse a sí mismo.

Era el fuerte de esas chicas en lo que él fallaba, y no había viceversa.

Y de la nada, Yugyeom confesó su enamoramiento hacía él.

Comenzaron a salir, porque necesitaba tratar de sacarse a TaeHyung de la cabeza, pero eso no mejoró en nada, sólo se sentía más culpable, porque no lo quería, porque lo estaba usando y TaeHyung seguía feliz de la vida, ajeno a todo y todos.

Cortaron cuándo este se dió cuenta de que su amor no era recíproco, por suerte, en buenos términos y de él llegaron más rellenos a su vida, todos fueron una compañía sexual, un relleno emocional, y después, cuándo lo dejaban o los dejaba, quedaba con un vacío que pastillas para dormir, para la depresión, para la ansiedad y demás rellenaban momentáneamente.

Su vida comenzó a ser una mierda, se estaba hundiendo en las fauces de sí mismo, y cuándo se quedó sin fuerzas, cuando ya no tenía ganas de seguir viviendo TaeHyung cambió, de ser el amable, compresivo, dulce, torpe pero muy lindo, a uno odioso, cruel, grosero, borde pero aún muy apuesto.

Y eso pareció destruirlo más, porque ya no eran presentaciones de novias adorables y buenas, no, eran mujeres malintencionadas, que querían herirlo, o simplemente acostarse con él, y a TaeHyung no le importaba en lo más mínimo.

Se perdieron los apelativos cariñosos, de las noches charlas eternas agradables y divertidas, ahora sólo quedaban burlas e insultos a su sexualidad. Cómo si no supiera todo lo que sufría por eso.

Era doloroso, porque su primer amor se había extendido tanto, y dolía como la mierda, no se podía sacar a su mayor de la cabeza, permitía cualquier cosa que viniera de él. Buena o mala, la aceptaba con los brazos abiertos.

No tenía personalidad, era alguien tan vacío. Cómo una piedra.

Se intentó matar, no una, muchas veces, pero la que lo llevó casi a la muerte de verdad fue cuándo bebió pastillas después de una pelea con TaeHyung, esa llegó a tal grado que este confesó el odio que le tenía a los homosexuales y que él era uno, insinuó que lo odiaba y se fue, dejándolo más desestabilizado que nunca. Ese día peleó con sus padres, con el CEO y leyó críticas en internet.

Por poco muere, sino fuera por JiMin estuviera descansado, no lo culpaba, pero se sentía algo doloroso que estuvo a punto de dejar de sufrir, para siempre.

Desde ese momento surgió algo entre ellos, su corazón se inclinó un poco al mayor y este le confesó su amor cuando despertó en el hospital.

No tenía por qué decir que no.

Aunque no sentía lo mismo, podría estar mintiéndole, usándolo como las anteriores parejas que tuvo, pero ahí estaba, JiMin sabía que le gustaba TaeHyung, él se arriesgó... No tenía la culpa.

O al menos no toda.

Había caído en un agujero negro de mala desiciones, un pozo sin fondo y por más que trataba de nadar a la superficie le era imposible.

Sólo tenía dos opciones, lo supo con el tiempo.

Dejarlo estar o tirar la toalla.

Él eligió dejarlo estar, aunque doliera mucho.

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goomiel 2023 <3

amor imposibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora