Mientras la clase transcurría, mi conversación con Sebastián se hacía más divertida, claro; el resto de la clase tuvimos que llevarla a cabo, atreves de notas y es que la profesora nos reprendió en más de una ocasión. Nos burlábamos del peinado alto y del chillón tono de voz que tenía al hablar.
"¿Sigues haciendo natación?"
"Si, luego de la clase, iré a nadar con Alice"
"Me encanta su cabello, tiene estilo"
"Alice es, una eminencia jajajajajajaj"
"Ella te ama."
"Y yo a ella, es mi mejor amiga."- mientras le respondía, sentí como me mordía el labio haciendo una mueca coqueta.
"Conseguirás una cortada, si continuas mordiéndote así el labio"-escribió-
"Aguanto con todas mis fuerzas las ganas de reírme"-mentí, en realidad estaba mirándolo de manera disimulada o al menos trataba. Su piel tenía un buen tono y parecía estar muy bien hidratada para ser la de un adolescente de 18.Bueno chicos, recuerden entregar la primera asignación el lunes próximo.
Salí de nuestra pequeña burbuja, anoté lo que estaba en el pizarrón al tiempo que el timbre sonó dando fin a la clase. El, primero se puso en pie no sin antes anotar en mi libreta su número de celular, su nombre en MySpace y Messenger. Saque mi IPhone 3gs anotándolo con lentitud, comenzaba a extrañar mi antiguo celular de teclas, me consideraba no muy apto para el cambio de teléfonos clásicos a táctiles; pero era 2009 y todo comenzaba a cambiar de manera trascendental, como ocurría al final de una década. Una vez anotado me tome el atrevimiento de textearle un simple: "Hola", para luego meter de vuelta el celular a mi bolsillo. Mientras caminaba hacia mi siguiente clase mis piernas deseaban dar saltitos de emoción...
Aquel primer día de clases trascurrió en un abrir y cerrar de ojos, la mayoría de lo tomado parecía ser sacado de un disco rayado, los profesores nos preguntaban nuestros nombres y que deseábamos estudiar en la universidad. Para cuando salimos de la clase de álgebra Alice y yo nos dirigimos a toda prisa a nadar.
A medida que me movía través del agua mis músculos se movían sincronizados, danzaban en el agua de una forma hermosa y equilibrada. Según el entrenador Parker, mi delgado cuerpo era perfecto para el deporte, mis ojos miraron a Alice, esta se movía al estilo libre que en natación consiste en mover los brazos en el aire con la palmas hacia abajo dispuesto a ingresar al agua junto a unos codos relajados mientras uno de los brazos avanza bajo el agua. En este tipo de estilo las piernas se mueven hacia arriba y abajo, clásico. En lo personal mi favorito.
¿Y, como te fue en clase de biología?- se acercó a mi lado-
A que no adivinas quien es mi nuevo compañero de clase.
No me hagas adivinar pendejo, ¿Quién es?
Sebastián Wilson.
¡¿Estas de broma?!, Sebastián Wilson estuvo en mi clase de biología de primer año, ¿Qué demonios hace allí?
No lo sé, solo sé que nos hicimos muy buenos compañeros.
Hey...ten cuidado amigo, conozco ese tonito de voz.
Supe enseguida a lo que se refería mi mejor amiga, me escuchaba como si Sebastián Wilson me gustara.
Eres tan maldita...
Eres como mi esposa, te conozco más que a mí misma.
Lose.
¿Al menos te dirigió la palabra?
Bueno, es curioso puesto que es muy amable, conversador e incluso me dejó su número de celular.
¡Sebastián Wilson te dio su número de celular!
Dilo más alto, cabrona.-mi sarcasmo fue evidente-
¿Qué?, no le veo problema alguno.
Alice, estamos hablando del próximo rey del baile, sin mencionar el chico más popular de toda la escuela.
¿Y?, tú eres igualmente popular.
No, yo solo fui el chico abiertamente gay en pisar la escuela, aquella salida del armario enterró mi vida social.
Fuiste valiente aquel día, estoy y siempre estaré orgullosa de ti por ello.
¿Una carrera?
Creí que jamás me la propondrías.
Luego podremos ir a comer algo pero antes tendremos que llevar a Thomas a casa.
Perfecto.Una vez cambiados fuimos al campo de juego, no era mi lugar favorito, allí ocurrieron la mayoría de mis problemas, socialmente hablando. Localicé a mi hermano en menos de cinco minutos, se movía de manera rápida, ágil parecía haberse adaptado sin problema al equipo pero sobre todo note que había logrado conseguir un lugar.
El pequeño Thomas abriéndose paso en la monarquía.- la voz burlona de mi mejor amiga se coló en mi oído-
Quién lo diría, el hijo de puta juega muy bien.
Capté su atención y este pidió tiempo, le hice una señal a lo que este comprendió y se acercó a nosotros. Estaba sudado.
Iré a comer con Alice, ¿ya casi terminas?
Si, dame cinco minutos para despedirme.
Thomas se alejó corriendo hacia el equipo, mientras se despedía Sebastián se acercó e intercambiaron varias palabras para luego ir en nuestra dirección.
Puedes irte adelantando si quieres, uno de los muchachos me llevara a casa.
¿Enserio?-respondimos Alice y yo al unísono-
Si, no se preocupen.
No creo que sea buena idea, ellos son...
Se lo que son, tranquilo conmigo no se han metido y tienen claro una cosa, conmigo y ni siquiera contigo pueden atreverse a molestar.
¿Cómo lo hiciste?-pregunto Alice-
No creo que quieras saberlo.-respondió apretando sus puños-
Bueno, nos vamos, no llegues tarde a casa.
Entendido.
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Di, que me recuerdas volumen 1
RomanceSe veía muy profesional mientras se movía por mi habitación escribiendo en el improvisado pizarrón había comprado el cual no había utilizado hasta ese momento. Se me hizo fácil captar atención e igualmente perderla al ver como sus labios se movían m...