Capítulo 34.

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Se separó un poco de la puerta, dejando medio arrimado, y se cruzó de brazos.

Otro silencio adornó con el ambiente incómodo.

-¿De que quieres hablar? yo no tengo nada para decir- Murmuró, mirando a cualquier lugar que no fuese la persona que tenía al frente.

Lauren suspiró, pasando su pelo de un lado al otro en un acto nervioso.

-Escucha, se que no es justo como actúe estos años, supongo que no quería ver la realidad, pero me gustas, ¿okay? y no es una maldita broma o algo por el estilo-

Camila tragó saliva nuevamente. Dios, no importara cuánto estaba tratando de ignorarla, su panza parecía un zoológico en aquellos momentos.

-Está bien, pero ya te dije que es tarde-

Lauren rodó sus ojos, exasperada.

-Lo sé, lo entiendo, solo te estoy pidiendo una segunda oportunidad para demostrarte que lo que digo es en serio-

Camila pasó sus palmas por su pantalon en un vano intento de que dejaran de sudar.

No podía negar que Lauren también se veía nerviosa; era la primera vez que no la miraba con el seño fruncido o le hablaba cortante para que se corriera de su asiento.

Suspiró derrotada.

-Está bien, pero debes ganártelo-

Sin esperar respuesta alguna, se giró para entrar a su casa.

Lauren alzó sus cejas, confundida, todo había pasado tan rápido que no alcanzó a reaccionar.

-Me vas a volver loca, Cabello- murmuró, girándose para volver en dirección a su casa.

Camila rió, todavía escuchando por detrás de su puerta.

Rosa [camren].Donde viven las historias. Descúbrelo ahora