Un flechazo en el mar

Capitulo 7

Anna despertó, poco a poco abrió sus ojos la luz del sol entraba por la cortina, aún se sentía algo mareada pero mucho mejor que ayer, miró a su alrededor y entonces lo vio, él estaba ahí dormido junto a ella ¿Acaso había pasado toda la noche a su lado? se había preguntado la chica, la cual no se resistió y comenzó a acariciar su cabello suavemente.

Namor sentía algo suave, un pequeño roce, se sentía tan bien que quería quedarse un poco más, pero pronto recordó...Anna, su Anna, se despertó bruscamente y entonces vio esos ojos color marrón que tanto le gustaban -¡Anna, despertaste!- dijo mientras tomaba entre sus manos las mejillas de la chica -Mi Anna, estás bien- dijo para después acariciar sus mejillas y mirarla fijamente, sus ojos brillaban y sus labios lo llamaban -Oh Anna- no soporto más y comenzó a acercarse lentamente, sentía su respiración, debía de hacerlo ahora o se arrepentiría para siempre, así que posó sus labios sobre los de ella, era un beso, se sentía tan bien, sus labios encajaban perfectamente con los de él, ella no sabía como reaccionar pero sabía que no lo iba a apartar, de cierta forma había estado esperando esto desde hace mucho, siguieron juntos hasta que el aire comenzó a faltarles, se separaron lentamente, Namor vio lo sonrojada que estaba la chica -¿Aún te sientes mal?- pregunto preocupado, la chica negó -No, solo que eso fue... mmm realmente increíble- Él dios estaba por hablar pero entonces Atumma entro -Señor lo siento por interrumpir pero tenemos problemas con la científica, será mejor que venga- Namor asintió

-Tal vez me tarde un poco pero volveré, siempre volveré por ti- dijo y después le dio un corto beso, e indicó a sus guardias que la vigilaran. 

La chica se quedó ahí, ella no sabía si esto había sido un sueño creado por su alta temperatura o realmente había pasado, pero ella estaba realmente feliz. Dos días después ella se encontraba recuperada pero K'uk'ulkan no había regresado, pasó una semana y ella no sabía absolutamente nada de él, sabía que él tenía que regresar pero estaba comenzando a hacerse ideas en su cabeza.

Pero una mañana mientras se encontraba desayunando por un momento creyó escuchar una voz familiar, así que se acercó a la cabaña de donde parecía provenir aquel ruido, una parte de ella esperaba que él ya hubiera vuelto así que entró sin pedir permiso pero al hacerlo se llevó una gran sorpresa – ¡Shuri!- del otro lado se encontraba una chica morena, alta y de pelo corto que hablaba con el dios, aquella chica la miró con sorpresa – ¡Anna!- la chica corrió a abrazarla 

–Todos creían que estabas muerta, tu padre... ¡por dios!, él está extremadamente afligido, te han estado buscando por todas partes, pero no te preocupes yo te llevaré a casa- Fue en ese momento que Namor decidió entrometerse en su reencuentro -¿Así que ustedes dos se conocen?- Anna lo miró y asintió –Así es, la verdad solo he ido una vez a Wakanda pero aquel día conocí a Shuri y nos hicimos muy buenas amigas, ella es la hermana de uno de los amigos de mi padre  –Oh vaya eso jamás lo imaginé- dijo aquel hombre con algo de nerviosismo 

-Y a todo esto, ¿Qué haces aquí?- preguntó Anna. Shuri no llevaba mucho tiempo en Talokan pero por la mirada que tenía Namor y la vestimenta que traía Anna, la cual era incluso mucho más hermosa que la que le habían dado a ella podía intuir lo que estaba pasando entre ellos dos, por una parte quería contarle la verdad a su amiga pero sabía que eso podía molestar al hombre pez, así que inventó una pequeña excusa –Por tratados oficiales de Wakanda- y vio el alivio en la cara de Namor

-¡Genial!, tal vez cuando termines puedes venir conmigo y te mostraré todo, es un lugar increíble, claro solo si su rey me lo permite – Namor puso una sonrisa en su rostro y asintió 

–Bien entonces me retiro, nos vemos después- y salió rápidamente.

Cuando Anna por fin estuvo lejos Shuri hablo firmemente ante el hombre pez -¿Qué hace ella aquí?- Namor simplemente la miro retadoramente –No es de su incumbencia princesa-

-Claro que lo es, ella es mi amiga y todos la buscan, pero aquí lo más extraño es que no hayas dado ninguna señal de tenerla contigo, no creas que no conozco tu intención, mi hermano me contó de la pelea que tuviste con ellos hace algunos años y que buscabas una forma de debilitarlos y estos meses Hawkeye el nuevo líder de los vengadores a estado totalmente distraído por estar buscando a su hija- 

-Mira princesa puede que ese haya sido mi objetivo principal pero debes entender que mis intenciones han cambiado y no planeo hacerle ningún daño a Anna, solo que la tendré aquí conmigo un poco más de tiempo- Shuri abrió más los ojos y después de procesarlo un momento soltó una gran carcajada –¡No puede ser¡- continuo riéndose, el dios la miró extrañado, cuando por fin Shuri terminó con su ataque de risa hablo –Estas enamorado de ella- Namor se sonrojo un poco –¡Claro que no!- Shuri lo miro de manera divertida –¡Claro que sí! tan solo mírala, está vestida como si fuera la reina de este lugar, y cuando entro en la habitación te pusiste más pálido que un colonizador, además tú me acabas de hablar de un brazalete hecho para tu madre y ella trae en su muñeca uno exactamente igual al de la historia y déjame decirte que no a cualquiera le das un brazalete de tu madre, si no pregúntale a mi hermano, él le regaló un anillo que era de mi madre a Nakia y bueno ellos llevan casados como 2 años-

Namor simplemente la miro y rio –La verdad es que tienes una mente muy imaginativa, yo no la amo, simplemente la quiero aquí para seguir negociando con los vengadores- dijo sin inmutarse

-Claro lo que tú digas, pero cuando un día la escuche llamarte "mi amor" en lugar de "Namor" me voy a reír como no tienes idea- comentó la muchacha 

–Ahora volviendo a nuestros asuntos necesito que dejes ir a Riri, ella prometió no seguir trabajando en la máquina y se quedará en Wakanda bajo vigilancia- Namor lo pensó por un momento –La dejare ir con la condición de que no salga de Wakanda por al menos 5 años y que Anna se quede aquí conmigo- propuso el dios

-¿Qué te pasa? Yo no puedo aceptar ese trato, Anna es mi amiga y yo no puedo salvar a mi pueblo a costo de que ella se quede aquí, aparte su padre y mi hermano me matarían si lo hago-

-Bueno esa es mi oferta, tómala o déjala- dijo mientras salía de la habitación. Shuri sí que estaba en un gran aprieto.

 Al caer la noche fue junto a Riri y Anna ya estaba ahí, al parecer ella le había  contado un poco de lo que estaba pasando y además de eso pasaría la noche con ellas. Pero a la mañana siguiente mientras se arreglaban escucharon ruidos en la entrada y varias guardias cayeron al suelo fue entonces cuando Shuri vio a Nakia entrar -¡Rapido chicas, vámonos de aquí!- aunque al igual que Shuri se sorprendió al ver a Anna y corrió a abrazarla –No sabes lo feliz que van a estar cuando sepan que te encontré, pero ahora apresúrense- 

Anna estaba en un encrucijada, por una parte estaba realmente feliz de volver con su familia, pero Namor, ¿Qué pasaría con él? -Vamos Anna- gritó Shuri, una parte de ella sabía que debía ir con ellas, así que antes de partir tomó el anillo que siempre utilizaba, aquel que solía usar su padre y lo dejó en la cama junto con una de las plumas de su vestido, esperando que él lo viera.

Todas salieron corriendo y con ayuda de Nakia subieron de vuelta a la superficie y a Wakanda.