Capítulo 18

180K 8K 363
                                    


No

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

No. No puede ser. ¡Esto no puede estar pasándome! Mi peor pesadilla materializada frente a mí. Mi cara es de puro terror, él lo sabe y se ríe con esa risa maníaca que me asusta hasta la mierda. Con voz ahogada, pregunto:

-¿Q...qué estás haciendo aquí?

-¡Vaya bienvenida! ¿Así me recibes después de todo este tiempo?

-¿C...cómo me encontraste? ¿Cómo entraste aquí?

-No tengo por qué darte explicaciones. -me mira de arriba abajo con apreciación y ronronea: -Ha valido la pena la maldita espera.

Con aprensión, le advierto:-Tienes que irte. Mi esposo...

-Sí, tu esposo. -escupe las palabras con odio. -¡Ese hijo de puta me quitó lo que es mío!

-¿De qué estás hablando?

-¡No te hagas la estúpida! Sabes muy bien de lo que estoy hablando. ¡La jodida apuesta! Se suponía que yo sería tu primero, no ese vaquero imbécil.

-Deja a Logan fuera de esto.

Niega y exclama:-¡Ahora es que estoy comenzando! ¿Tienes idea de cuánto dinero iba a ganarme? No, no la tienes. Tuve que pagarles mucho dinero a mis compañeros del equipo de fútbol porque perdí. ¡Y todo por tu culpa! Me dejaste tirado en el suelo y fui el hazmerreír de toda la maldita universidad.

-No hice nada que no te merecieras.

-Estás jodidamente equivocada, maldita zorra. Pero tú sí que te merecías una buena follada en la parte trasera de mi Mustang. Fui paciente, pero ya he esperado demasiado. Ahora vengo a cobrar la apuesta.

¡Dios mío! ¡No! Estoy paralizada del miedo y no sé qué hacer. Mi perro no para de ladrar y sé que si Justin se acerca a mí, él lo morderá, pero no quiero que le pase nada a mi perro porque este hombre enojado es fuerte, muy peligroso y es capaz de cualquier cosa.

De repente, le digo a mi perro:

-Pulgoso, ve a buscar a Logan. ¡Corre!

Mi perro no duda ni un segundo y sale disparado fuera del invernadero, y sé que irá por mi esposo. Miro a mi exnovio, Justin McCoy y me fijo en que sus ojos están rojos y luce agitado. Al ver lo que hice, él suelta una horrible carcajada que me hace estremecer. Con prepotencia, pregunta:

-¿Es una jodida broma? ¿Crees que ese perro de mierda te va a salvar? Nada ni nadie impedirá lo que vine hacer, campesina. -ruge: -¡Serás mía!


* * *

* * *

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mi vaquero de al lado (Corrigiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora