Si Tu Marido No Te Quiere (Enzo, Julián y vos)

18- México

Enzo Fernández

-Amigo, no sé que hacer ahora- me dijo Juli.

Me había contado que su tío, quien está en Qatar con el resto de su familia, tuvo una descompensación y lo internaron, estuvo toda la noche en el hospital y perdió su celular. Por eso nunca llegó a su cita con Bianca.

<Me parece que nos vamos a matar los 3>

-Deberias hablar con ella, te va a entender.

Si, aunque me duela mucho pienso ayudarlos a que estén bien. Solo porque quiero demasiado a Bianca y se que ella lo ama a el, no a mí.

-Bueno, pero no la voy a ver hasta después del partido. Espero que no me odie.
-Ayer estuve con ella, me pidió que la busque, no te odia Juli, lloró toda la noche, pero seguramente va a entender cuando le expliques.

<¿Lloró toda la noche? Gimió toda la noche querrás decir>

Quise reírme por mis pensamientos, pero no podía. Soy un amigo de mierda.

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Horas después el partido está a punto de empezar, no hoy de titular y lo entiendo, apenas jugué un par de veces con la selección, no me puedo esperar ser titular en mí primer mundial, encima en el segundo partido.

Los chicos cantaban el himno desde la cancha y nosotros desde el banco de suplentes.

Juli, Paulo y yo estábamos mirando el partido de atentos. Estábamos bastante mejor que México peor todavía era un 0-0.

-¿Por qué estás transpirando tanto Paulo?- preguntó Juli.
-Hace mucho calor- respondió el.

Ya era el segundo tiempo, ninguno de los 3 había entrado y Paulo parecía haber corrido 3 maratones.

-Pero si nosotros no estamos tan chivados- le digo yo riéndome.
-Fernandez calentá- dijo Aimar.

Okey, voy a entrar, no lo puedo creer.

Me puse a calentar y en el minuto 57 salió Guido Rodríguez y entré yo.

A los 63' entró Juli.

Y a los 64', con una perfecta asistencia se Ángel Di Maria, Messi metió el primer gol del partido.

El sueño revivió. Ahora es más literal que nunca. Muchachos, ahora nos volvimos a ilusionar.

La verdad, no sé si como ni cuando, pero en el minuto 87 recibo el pase de Lio, boludeo a un Mexicano y pateo al arco. Gol. Argentina 2 México 0. No lo podía creer. Corrí, festejé con Messi y los chicos, después le di un beso a mí escudo y señalé al palco donde, hace más de una hora había visto a Bianca sentada con mí camiseta, después hice una O con mis manos para también dedicarle el gol a mí hija.

A Bianca la vi saltando y también besando su escudo.

En cualquier momento me empiezo a volver loco.

Cuando el partido terminó, 2-0, festejamos un rato con la gente y después entramos al vestuario, ahí la vi a Bian con Oli, no entendí muy bien que hacían juntas pero tampoco tuve tiempo para penas porque Bianca vino corriendo a mí y casi aplasta a Oli entre medio de los dos cuando me abrazó.

Claramente correspondí su abrazo y cuando se separó alcé a mí hija.

-Sos un genio ¿Cómo hiciste eso?- preguntó casi saltando de la felicidad.
-La verdad no sé- me reí.

Julián se paró atrás de Bian y tocó su hombro.

Ella se dio vuelta y apenas lo vio volvió a girar para mirarme a mí.

La miré como diciéndole escuchalo ella suspiró y se que entendió lo que le quise comunicar cuando volvió a mirar a Julián y le preguntó que quería.

Bianca Otamendi

-Explicarte lo que pasó ayer- me dijo el.
-No hay nada que explicar, me dejaste plantada Julián.

Decidimos salir del vestuario porque todos estaban escuchando.

-¿Me dejas explicarte?
-Ajá- dije de mala gana.
-Mirá, el cáncer de mí tío parece estar expandiéndose. Ayer tuvo una recaída y nos asustamos así que lo llevamos al hospital, lo internaron y me tuve que quedar con el toda la noche. Perdí el celular, o me lo robaron, no sé.

Ahora me siento como la mierda más horrible del mundo.

El estaba cuidando de si tío con cáncer en el hospital y yo estaba cogiendo con su mejor amigo. Soy una hija de puta.

-Perdon, nunca me imaginé eso- dije sincera.
-Entiendo, no es algo que esperas.

Me miró y se acercó para después darme un corto beso.

-Feliz aniversario mí amor.
-Feliz aniversario- no me salía decirle un apodo lindo, me sentía culpable.
-¿Festejamos un rato con los chicos y después en el hotel hablamos mejor y vemos cómo compenso lo que pasó?
-Dale, de una- sonreí.

Volvimos al vestuario y ellos seguían hablando y riendo entre ellos. Segundo partido que jugamos, primero que ganamos, y ya estamos festejando como si fuéramos campeones del mundo. Creo que es algo que todos anhelamos tanto que ya vemos imposible el echo de perder.

Después de casi una hora volvimos todos al hotel, ésta vez decidí no ir entre medio de Enzo y Juli otra vez, me sentía demasiado mal.

Fui entre Cuti y Lean, tenemos a Nico y Licha adelante.

-Entiendo ¿Lo vas a perdonar?- me susurra Lean.
-Obvio boludo, no estaba en sus manos si su tío se enfermaba- respondí.
-Igual todo muy raro- opina Cristian también susurrando.
-¿Vos decís?- le pregunto.
-Eu, para mí que te mintió pero no del todo- se mete Licha.
-Si un mínimo detalle es mentira que se olvide de sus dientes- sonríe ni hermano.

Estos 4 asesinos rompe piernas y rompe pelotas están locos, pero son un amor y unos chismosos. Los amo.

Llegamos al hotel y cuando bajé Juli me estaba esperando para entrar.

-¿Vamos a tu habitación?

No entendía por qué quería tanto ir a mí habitación, pero bueno.

-Dale, vamos.

Subimos y entramos. Se tiró en la cama y me miró.

-Al final te pusiste la de Enzo.
-Si, pasa que anoche me enojé con vos y no quería usar la tuya hoy. Igual parece que nos trajo suerte ¿No?
-Mmm, parece- dijo no muy convencido.
-¿Estás celoso?- me reí.
-Puede que un poquito.
-Es nuestro mejor amigo Ju, tranqui.

No sé cómo podía decir eso teniendo en mí cuerpo marquitas ocasionadas por nuestro mejor amigo.

Me siento cada vez más mala persona, pero la verdad prefiero esto a decirle lo que pasó anoche.

-Vení- me llamó desde la cama.

Me tiré encima de él y me agarró de la cintura para empezar a besarme.

-¿Querés que te recompense por lo de ayer?

Pensé unos segundos, las marcas de Enzo aún no eran moradas así que no va a notarlas, y mejor si el me hace más para que después no sospeche.

-Creo que es una buena idea- sonreí.

Y así comenzó una noche de pasión reconciliación con mí novio.

¿El único problema? No puedo dejar de pensar en Enzo y comparar el sexo con el ayer y el de Julián ahora.

Aunque supongo que todas las personas que tienen relaciones con más de una persona hacen eso ¿No?

Pero hay un problema más grave.

No me siento como ayer con el. Enzo me hizo sentir completa, sentí que toqué el cielo con los dedos. Y Juli no estaba provocando eso.

Esta mierda  no me gusta para nada.