The Horrible Life of Luxury [Chester x Parker]

13. Negación

—Me niego.

El rubio abrazó contra su pecho la computadora mirando con enojo a Parker, Parker intento quitarsela, pero ni siquiera hacía mucho esfuerzo como para realmente arrebatarle el aparato de los brazos del otro.

—Chester, ya te lo dije, necesito este trabajo. Si logro cobrar algunos encuentros y el dinero de YouTube, entonces podremos tener el dinero suficiente para pagar las cosas de la casa unos meses más.

—Ya lo sé —Repitió—, pero no es la manera, Parker, no quiero ir. No quiero ir.

Parker suspiró pesado y se mantuvo alejado de Chester, miró de nuevo a los ojos al heterocromático y se rascó el cuello con inseguridad, mirandolo con seriedad a él y también a las vendas en su brazo. Pensó un poco.
Chester aún mantenía la mirada molesta y retrocedía cada vez que sentía que el pelinegro se acercaba.

—No tienes que ir.

—¿Que? ¿De que estás hablando?

—Puedo ir solo, Chester —Mantuvo su postura, curzandose de brazos—. Si voy solo… Tu puedes quedarte solamente a revisar los correos y ayudarme a editar los videos, entonces tendremos el dinero.

Chester se vió simplemente sorprendido y luego indignado, frunció más el ceño y gritó;

—¡Por supuesto que no!

—No puedes decidir por mi, mira, ya te lo dije, iré yo solo. Si no vas a ayudarme con los videos ni los correos entonces lo haré todo yo solo, pero me niego a que tu vayas o que perdamos la casa.

Chester se acercó agresivamente a Parker aún sosteniendo la laptop.

—Me niego a que vayas, ¡ya me hicieron daño, Parker! Y ¡Tu estabas conmigo esa vez! ¿Que pasa si te hacen algo peor por estar solo?

Parker dió la media vuelta y pensó en esa posibilidad.

—Pues tomaré el riesgo.

—… No —Mantuvo firme—. Está bien, tomaré el trabajo, si es la forma fácil de conseguir el dinero faltante... ¡Lo haré!

—Para nada.

Chester solo pudo molestarse más, puso la laptop en la mesa.

—¿Por qué? —Preguntó en un tono demandante.

—Porque te harán daño.

—¡Y a ti también!

—Conmigo es diferente, Chester —Lo tomó de los hombros—, podré cuidarme solo y si me pasa algo es mi problema, pero si a tí te pasa algo no me lo voy a perdonar.

Parker miró abajo con una mirada de impotencia en sus ojos, cerrando ambos puños.

—Eso nunca pareció importarte antes.

—¿Que?

—Antes, nunca… Nunca te importó si me hacía daño o no, si estaba bien o no, he vuelto a casa con moretones, mareos, he vomitado, he llorado hasta el cansancio, he intentado por años, Parker, por años he intentado hacerte entender lo estúpido que es este trabajo, pero solo te preocupabas por ti mismo —Quitó las manos de Parker de sus hombros—. Si antes te importé tanto como un pedazo de mierda… ¿Que es diferente ahora? ¿Por qué te importaría ahora?

Parker se mantuvo callado, hizo una mueca de incomodidad y miró a otro lado.

—Dije que lo sentía.

—Y ¿Crees que eso lo arregla todo? Has estado torturandome por años y ahora quieres jugar a que me quieres proteger. ¡Vete a la mierda, Parker! Haremos ese estúpido trabajo una sola vez más, ganaremos el dinero y no lo haremos más solo si es necesario, y definitivamente yo iré.

—Chester, por favor, no lo hagas difícil.

—¿¡Hacerlo difícil!? ¿Crees que ha sido fácil para mi? Lidiar contigo y tu maldito ego tanto tiempo hasta no poder más y tu vienes aquí a decirme que no lo haga difícil. ¡Estoy desahogandome Parker! ¡Te odio no sabes cuánto!

—Yo… Lo siento tanto.

—… Ya basta, es… Solo hagamos el maldito trabajo.

Acabaron ambos, con una voz quebradiza y un dolor en la garganta.
Parker ni siquiera podía mirar a Chester a la cara y se jalaba la ropa con estrés mientras miraba la lapton, no sabía como arreglar el pesado ambiente recien formado y solo mantuvo distancia, todo esto solo lograba estresarlos más y más.
No quiere perder la paciencia, no quiere responderle a Chester y ocasionar una pelea. Estaban en paz hasta ese momento en el que tocaron el tema de su trabajo, Parker no quiere perder a Chester de nuevo y hacer las cosas como antes, se mordía y lastimaba los labios acercando su mano temblorosa a la laptop y encendiendola para ver el primer correo que se encontraba.
Chester lo miró con una mirada vacía y se asomó.

—Emtonces… ¿Cual caso vamos a ver?

Parkee tragó saliva y se calmó un poco para después hablar.

—Petey's Playhouse