21. Pensándolo

877 64 146
                                    

⚠️: Contenido sexual.

--------------

A pesar de que Chester intentaba acercarse Parker parecía muy sumido en sí mismo.
Jura que hasta en un momento de la noche, mientras veían TV, intentó acercarse sexualmente a Parker y este ni cuenta se había dado del intento lujurioso de su novio por hacerlo sentir mejor.
Estaba preocupado de que su pareja se estuviera preocupando demasiado por algo en lo que no tenía mucho poder, sabía exactamente que le pasaba, Parker se sentía culpable por lo de Tommy y el no poder haber ayudado a la madre de esa cosa en el primer intento, cargaba con mucha culpa que él mismo se había puesto y no había como quitársela.
Tampoco es que le ponga cero atención a Chester, varias veces lograba distraerse un rato y prestarle respectiva atención al rubio, pero cada vez que volvía a recordar a Tommy y todo el daño que hace le costaba concentrarse en el resto del mundo.
Va un mes desde haber pasado lo de Petey's Playhouse y ninguno lograba recuperarse del todo de la adrenalina que les causó estar ahí, Chester aún tenía pesadillas con Friendo y Parker se negaba a dormir en cuartos diferentes porque no quería "descuidarlo".
De todos modos para ninguno era un buen rato, Chester no sabía como ayudar a Parker y Parker no estaba muy atento al mundo que digamos, fue hasta una noche, donde ni con su película favorita lograba concentrarse, que Chester decidió ponerle un fin a su silencio e intentar ayudar directamente al mayor.

-Okay, dime aquí y ahora; ¿Que pasa? -Parker lo miró, analizando un poco la pregunta como si no la hubiera escuchado directamente.

-Solo estoy preocupado, sabes eso.

-Lo sé, y resulta que mi novio no deja de pensar en eso, no solo te preocupa, Parker, te obsesiona.

-Es solo preocupación, entre más tiempo pasa más daño ha de estar sufriendo esa mujer por creer que esa cosa es su hijo -Se le veía molesto al respecto- Además de que la policía no quiso hacer nada.

-Ya lo sé, pero ya te dije que no es nuestra responsabilidad, podemos conseguir dinero de otra forma.

-No es por el dinero, Ches, es por esa familia... Hasta la hermana de esa pobre mujer sabe que esto está mal.

-Pues que se encargue ella -Respondió de mala gana.

-¿Cómo es que no te importa?

-No es que no me importe, es que no me incumbe, ni tú ni yo deberíamos ir a ese lugar solo por creer que somos responsables de la demencia de una mujer que no sabe reconocer entre un Skinwalker y su propio hijo de menos de diez años.

-No puedo creer que digas algo así.

-Es la verdad, Parker, y ya me estoy cansando de esta actitud tuya -Se levantó- No me importa si ya no me pones atención a mí, pero te estás descuidando a tí mismo, tus ojeras son enormes y casi no comes, ¡vas a volverte loco!

Parker miró a otro lado queriendo evitar el regaño de su pareja.

-Lo siento, pero en serio quiero hacer algo -Lo miró de nuevo- No quiero que nadie más muera por nuestra- Por mi culpa.

Hubo silencio y Chester suspiró, sentandose en el sillón y arrecostandose a él de nuevo, entrelazando sus dedos con los del contrario. Parker de verdad tenía buenas intenciones esta vez y se lo estaba reprimiendo, a pesar de que él era quien tenía razón no quería hacer sentir mal a Parker.
Se volteó a besar su mejilla para calmar la discusión de hace rato y contentar al peli-negro ganandose una mirada cansada de este.

-Mira, lo voy a pensar.

-¿Lo harás? -Chester asintió- Bien, entonces.

-Pero si en todo caso digo que no después de pensarlo, tú tendrás que dejar de insistir y tratar de concentrarte en cuidar de tí mismo, ¿entendido?

-Entendido.

-Perfecto, ahora págame lo que me debes de esa otra noche.

-¿En serio quieres que me acueste contigo ahora?

-Bueno, si estás muy cansado -Se alejó- ¿Quién soy yo para discutir?

-¡No! No estoy cansado.

El rubio sonrió de forma victoriosa.

-Eso fue lo que pensé, vamos a la cama.

-Como usted ordene, amor mío.

-No me pongas apodos.

Chester lo jaló del brazo hacía su cuarto y se encerró en este con el pelinegro, la TV quedó encendida y esperaban que el ruido de esta cubrieta el posible escandalo que llegaran a armar y las personas que viven cerca no se enteren.
Aunque si por Parker fuera que la gente se entere de su nombre y de quien lo gritará.

En el cuarto no esperaron sentirse tan agusto con el otro, no les costó ni avergonzó desvestirse frente al otro, ya se habían visto antes en ocasiones especiales o cuando les tocaba cambiarse en el mismo lugar.
Tenían lo mismo después de todo y no tendrían por qué avergonzarse de mostrar su cuerpo desnudo a su propia pareja, podían contar con el otro.
Chester se dejaba tocar y acariciar por el peli-negro quien recorría sus manos desde su pecho hasta sus piernas, levantandolas a sus hombros. No pensaba meter nada aún, quería sumirse un poco más en placer y cariño antes de eso, besaba el pecho del contrario sacandole suspiros y jadeos enamorados. En ningún momento de su vida creyó sentirse tan bien en la cama con alguien, ninguno de los dos, pero aquí están, entregandose a quien creían odiar y resulta que se amaban de la forma incorrecta al inicio.
Esto no era una prueba de amor ni un capricho para deshacerse de la calentura, no. Era una muestra de confianza entre ellos.
También era para ayudarlos a concentrarse en el otro por una noche, sin malos pensamientos, sin inseguridad, sin miedo, solo ellos besandose y dándose cariño.

A pesar de que le daba tal desconcierto, Chester dió por sentar a Parker a la orilla de la cama y él se ponía de rodillas en medio del otro, no necesitaba estimularlo, Parker ya estaba "parado" desde hace un rato al igual que el rubio, quien iba con su mano de arriba a abajo en su miebro y lamía temeroso el de Parker sacandole ciertos jadeos.
Parker intentaba acallar los ruidos que hacía sin éxito hasta sentir que Chester se lo metía directamente a la boca, tardando cierto rato en acostumbrarse.
El sabor no era algo de que preocuparse, tu solo imagina que lames tu brazo y ya, era piel, no una paleta de sabores, aunque si había cierto sabor ácido que se colaba casi invisible.
Subía y bajaba su cabeza lentamente intentando usar su lengua para causarle más placer al contrario, veía a Parker con una mirafa lujuriosa que iluminaba como si hubiera cierta luz fuccia en sus ojos, esa imagen del rubio junto con la caliete sensación de su boca en su pene lo estaba volviendo totalmente loco al punto de soltar gemidos un poco más fuertes, Chester sintió el miembro de Parker crecer en su boca como si se estirara y lo intentaba hacer más rápido, se estaba haciend adicto a esa sensación en su boca, babeaba y ciertas gotas de saliva se deslizaba desde sus labios al estar casi atragantandose con este, no creyó que le gustara tanto y parecía que no era el único que lo disfrutaba con deleite.

-Ches... Ya no aguanto más.

Esa fue una señal para Chester sacarlo de su boca lo antes posible y en cuanto estuvo fuera no tuvo tiempo de quitarse, el líquido blanco se dejaba caer en su cara haciendole cerrar los ojos de golpe al abrirlos notó la expresión de vergüenza en Parker.

-¡Lo siento! Dios santo, lo limpiare de inmediato -Tomó una de las cobijas y limpió con cuidado el rostro del rubio, a él no le molestaba que le cayera, pero se dejaba limpiar y acariciar.

En cuanto Parker terminó notó las manos del heterocromático posándose en su pecho y lueco su cuello, acercandose mucho aún con ese toque lujurioso en sus ojos.

-Dentro... Ahora.

Parker tragó saliva, no se creía lo increíblemente caliente que llegaría a ser su novio.

-Supongo que no tengo otra opción, ¿verdad?











N/A: Sigo en el próximo capítulo, ya los alimenté mucho, JAJA!

The Horrible Life of Luxury [Chester x Parker]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora