Dulce Obsesión

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A n d r e i.

—Te verás más sexy de lo que eres, créeme.

Con un gruñido cierro la laptop y tomo mi celular, enojado con la maldita idea de mi pajarito saliendo sin ningún tipo de protección a un club de mala muerte, me hierve la sangre solo de pensar en que mañana en la noche muchos hombres verán lo que es mío.

Y definitivamente querré que matarlos... ¡Joder! Efectuar un genocidio no está en mis malditos planes, pero ella vale la pena.

Masajeando el puente de mi nariz con una mano, utilizo la otra para llamar a Viktor y prácticamente ladrarle que venga a mi oficina. Ahora mismo debería estar haciendo una videoconferencia importante con Pierre Boissieu, tenemos negocios de mucho peso de los cuales discutir, pero sé que no podré concentrarme si no resuelvo éste jodido problema antes. Los últimos días han sido un dolor en el culo gracias a Alek, no quiero agregar un cosa más a la lista que solo sea el puto detonante para toda mi rabia, ira y frustración acumulada, y definitivamente no quiero descargar todo eso en mi mujer, eso podría influir negativamente en mis planes.

No pasan más de cinco minutos cuando la puerta de mi oficina es tocada y cuando concedo permiso de entrar, mi mano derecha se apresura a estar frente a mi escritorio. Tan eficiente como siempre.

—Necesito seguridad extra para mañana— ordeno, él asiente, sin embargo noto que su ceño se frunce ligeramente.

—La tendrá, jefe— dice sin titubeos—. ¿Hay alguna razón específica para esto? ¿dónde la quiere ubicada exactamente?

Lo observo en silencio unos cuantos segundos, sopesando si sería buena idea revelar mis intenciones o si debería guardarlas para mí mismo por un tiempo más, pero tomando en cuenta que Viktor es mi mano derecha y que podría necesitar más de su colaboración en el futuro con respecto a mi pajarito...

—Es para Zoe— me levanto para mirarlo con severidad—. Planeo convertirla en la futura Dama del Krovav, solo que aún no lo sabe y permanecerá así por un tiempo. Ella no debe darse cuenta de absolutamente nada, así que los hombres que se asignen para su protección deben ser los más discretos, ¿entendido?

—Entendido, señor.

Si lo tomé o no por sorpresa con mi declaración, lo oculta muy bien, se asegura de no mostrar ninguna expresión y esa es una de las razones por la que es uno de mis hombres de confianza, me agrada lo hermético que puede llegar a ser, es una cualidad que intimida a muchas personas.

—Ella saldrá con su mejor amiga mañana en la noche, asegúrate de hacerles llegar pases VIP de nuestro mejor club, ingenia algo para que no se vea tan sospechoso.

—Si, señor.

Asiento.

—Eso es todo, vete.

Sin mediar palabra deja mi oficina, así que una vez más me siento frente a mí escritorio, y para no dejarme caer en la tentación de volver a revisar las cámaras del apartamento de mi pajarito decido ponerme a trabajar. Hay tratos importantes que debo revisar, no puedo retrasarme con esto, ya tengo suficiente trabajo acumulado aquí luego de tener que ir a ocuparme de Alek. Aunque estoy bastante sorprendido de que esté más tranquilo luego de la discusión de hace unas horas, eso me hace tener mucha desconfianza, mi hermano menor es demasiado impulsivo y rencoroso como para que se muestre calmado luego de haberme apuntado con un arma.

Sin embrago, sé que él no sería capaz de matarme, seguimos siendo hermanos. ¿Planea algo para desquitarse? Tal vez, solo espero que ese algo no tenga que ver con Zoe. Verlo hablando con ella hoy me dejó un pésimo sabor de boca, no quiero tener que matar a mí hermano porque la dañó de alguna forma.