Una nueva profecía se ha dicho, y viene incluida con una maldición que pocos conocían.
En la búsqueda de Cronos se embarcarán los descendientes de Hades, Poseidón, Deméter y Nix.
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Book #1...
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Nico Jr
Cayó la noche y tuvimos que acampar a mitad de la noche. Estábamos alrededor de la fogata que hicimos, todo tranquilo hasta cierto punto. Veo que Gina se levanta y se aleja un poco, no tanto, pero si al punto que no la escuchemos susurrar.
—Bianca —me mira—, ¿cómo arreglaron las cosas tú y Gina?
—Pues hablamos de lo que nos molestaba, aunque su queja es tonta —me mira.
—Pues tú tampoco te quedas atrás—me cruzo de brazos.
—Pues si hablamos de actitudes, tú tampoco te quedas atrás —se ríe.
Bianca
—Gina —me mira de reojo—. ¿Problemas para dormir? —se gira para poder verme.
—Algo así —se ríe.
—Ya no te pude preguntar lo siguiente, ¿por qué odias a GianCarlo?
Suspira. —Te diré por qué. No me da buena espina —iba a hablar pero me gana la palabra—. Pero, probablemente eso no sea suficiente para enojarme con él, tal como lo dijo Matt. Digamos que algo en mí me dice que no podemos confiar en él. Pero no estoy segura.
—Dale la oportunidad, y vas a ver qué no es como tú piensas —la miro.
Iba a decir otra cosa, pero ya no lo dijo, ¿razón? La verdad no sé. Pero me dejó con la curiosidad.
—Está bien, pero si me entero que te lastima, juro que lo mando al Tártaro —me mira.
—Ok, ok, suficiente con las amenazas. —la empujo—. Ya estoy harta de que lo anden amenazando. Es mi vida, no la suya, a este paso si me va a dejar —me voy de ahí.
Gina
Ella se va con los chicos, y yo me quedo en el mismo lugar, tratando de que sus palabras no me afecten. Aunque por cierta parte tiene razón, supongo que si debo resignarme y ya no molestarla con eso. Hablaré de esto con mis padres y Nico, pero después de que terminemos la misión.
—Sssss, pero que tenemos aquí —me doy la vuelta y me veo cara a cara con una Pitón.
—¡Gina! —grita mi hermano.
—Duele que tu hermana no confíe en ti, ¿cierto? ¿Quién le creería a una niña cómo tú?
—Aaah, suficiente —activo mi arma y la ataco.
—Eres muy débil, necesitas a un alguien que te ayude —se burla.
—Yo no necesito a nadie —la sigo atacando.
En eso salen 5 arpías. —No la molestes Renah, linda, ¿por qué no te unes a nosotros? Serás poderosa y respetada por todos.
