Parte 11

374 58 0
                                    

YEONJUN

ÉL ESTÁ SOBRE MÍ. Sus manos, su boca. Estoy perdido en algún lugar de un mundo entre la euforia y la angustia. Porque esta es la primera vez que Soobin y yo estamos juntos. Solos.

Es mejor y peor de lo que jamás pensé que sería.

Está boca arriba, abierto para mí mientras me muevo dentro de él, y aunque tiene su teléfono en la mano, tomando fotos de mi polla dentro de su estrecho agujero, no me importa. Porque por alguna razón, y de manera completamente inesperada, estoy emocionado de incluir a Beomgyu en esto.

Es difícil creer que Soobin y yo nunca habíamos tonteado solos antes, pero tiene sentido. Antes, teníamos que encontrar escapatorias para follar debido a nuestras posiciones en el trabajo, pero ahora eso no es un factor.

Ya no tenemos esa restricción.

Todo lo que Soobin tiene que hacer es respirar cerca de mí, y me ahogo en mis sentimientos por él. No importa cuánto tiempo pase entre ver a Soobin, no importa cuántas primeras citas tenga en Virginia sin querer una segunda, nada puede romper este control que tiene sobre mí.

Excepto quizás por Beomgyu. Pensé que, si esto alguna vez sucediera, si tuviera la oportunidad de estar con Soobin y solo con Soobin, lo único en lo que podría concentrarme sería en él, pero Beomgyu está al frente de mi mente.

Podría haber inventado la excusa para llamarlo para tener una razón para abalanzarme sobre Soobin, pero cuando dijo que no estaba disponible, me decepcionó genuinamente. Al igual que la vez que trató de ponerse al día conmigo y yo estaba demasiado ocupado con el trabajo.

Pensando en lo que estaría haciendo Beomgyu si estuviera aquí con nosotros en este momento, nunca he estado tan en sintonía con otra persona mientras estoy con Soobin, ni siquiera cuando están en la misma habitación, besándome.

Beomgyu está a miles de kilómetros de distancia y, sin embargo, para mí, está aquí con nosotros.

—Deberíamos entrar en la industria del porno —jadea Soobin.

—Deberías, tal vez. —Disminuyo la velocidad para admirar su cuerpo—. La gente se volvería loca por estos abdominales. —Deslizo mis dedos sobre su deliciosa piel y bajo hasta su prominente V.

—Quieres decir que se volverían locos por estos abdominales.

Me río.

—Eso también.

—Si hubiera sabido que mencionar la pornografía te ralentizaría, habría mantenido la boca cerrada. —Se retuerce debajo de mí.

—Solo un segundo. Dame el teléfono.

Me lo pasa con la aplicación de la cámara abierta y lo sostengo sobre mí con la cabeza hacia atrás. Presiono ciegamente el botón, suena el sonido falso del obturador y luego lo miro.

—Vale, tienes razón. Esto es jodidamente caliente. —Le enseño la fotografía.

Desde el ángulo en que la tomé, es una foto que baja directamente por mis músculos duros con Soobin debajo de mí, la cabeza de seta de mi polla alineada con su agujero.

—Es bueno tener carreras de respaldo. —Presiona algunos botones—. Está bien, creo que le hemos dado suficiente material de banco de azotes a Beomgyu. Necesito que acabes conmigo.

Con placer.

Y a pesar de que estoy obteniendo todo lo que siempre he querido, lo mismo que pensé que me completaría, falta algo.

No, no algo.

Alguien.

Extraño muchísimo a Beomgyu.

When I Find The Truth 《Yeonbingyu》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora