No sabemos cuando estamos preparados para amar otra vez y tal vez... Nunca lo estemos. Porque nunca estaremos lo suficientemente sanos para confiar en alguien nuevo después de tanto daño, aun así cuando eso pasa solo nos queda aceptarlo.
Aceptar el amor aunque tengamos miedo... Porque yo tuve miedo cuando le ví en mis sueños por última vez. Aunque nunca entendi si entre él y yo realmente hubo amor.
Y también tuve miedo cuando la vida me presento a Brain el día que lo puso justo delante de mí, con su sonrisa amable y esa jodida manera de quitarme los suspiros y la pena con un simple "hola."
El último recuerdo de Clay fue solo un sueño, él estaba en el bosque y aunque estaba cómoda y todo se sentía real, mi conciencia sabia que todo lo que pasaba en frente de mis ojos era solo producto de mi mente, porque aunque mi corazón anhelaba tanto que pasara, y se sintiera como la primera vez.
Mi mente ya sabía que cada vez que Clay volvía otra vez algo en mi no estaba bien, que era yo la que iba a fallar una y otra vez, por que aunque siempre quería ir hacia él... Y la atracción que teníamos se mantenía tal cual, era ir corriendo al peligro. Porque en la fantasía nunca íbamos a poder estar bien, aun así siempre había algo que nos mantenía en la distancia justa.
Ni cerca para tocarnos, ni tan lejos para poder vernos.
Era solo un sueño, porque mis mariposas azules, las mismas que me advirtieron más de una vez sobre mis sueños y alucinaciones estaban posada en cada hoja o espacio donde mirara.
Y sus ojos, los mismos que por años, semanas y meses mire, seguian iguales tan claros como siempre, aun así brillaban a la distancia.
Y ni hablar de su cuerpo, que de manera exagerada abundaba una luz tornasol que parecia desbordar el eje entre él y yo. Era como si el mismo sol estuviera detrás de él y por ende solo pudiese ver su silueta, nada claro para mi vista, pero demasiado asertivo para mi mente que sabía que de algún modo, ese era él.
Porque podía perderme mirando los detalles de un mundo sin color, pero ese en todos los lugares, en todas sus formas y movimientos, era él y en mi interior yo lo sabía.
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PERDIDOS EN LA VÍA LÁCTEA© [TERMINADA]
Teen Fiction"PORQUE NI LAS BRÚJULAS PUEDEN ENCONTRAR LA DIRECCION DE UN CORAZON ROTO". Arcie Mckley padece de una extraña enfermedad del sueño, donde lo más inimaginable y las pesadillas, pueden convertirse en una realidad. Cansada y abatida de las dudas de la...