Secret

Capítulo 7

Contenido fuerte. Leer bajo su responsabilidad. (Pueden saltarlo hasta el siguiente separador)

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Solo pienso en él

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Pude sentir lo nervioso que se puso con mi confesión, al tragar seco e intentar ignorar mis palabras; aún así sus manos seguían en la silla, tenía que hacer algo. Tomé su mano y yo misma la puse en mi muslo, también le ayudé un poco a moverla de abajo hacía arriba y la dejé cuando noté que él lo hacía por su propia cuenta y no solo eso, se acercó a mi cuello y dejó pequeños besos haciendo que este se fuera hacia atrás y darle más espacio para que siguiera besándome, teniendo en cuenta que ya no solo eran besos, mordía y lamía dejando pequeños puntos rojos, estaba tan sumida en mí que en ese momento no me importó que dejara marca

-- Ahora ¿Me dirás quién te hizo lo del labio? - Su voz ronca hizo palpitar mi zona abajo y él solo quedaba atento a una respuesta -- ¿No me quieres decir? -- Su brazo seguía en mi muslo, cuando no quise contestar su agarré se volvió más fuerte y su otra mano que seguía libre la posó en mi cuello -- ¿Quién fue? - Ya no estaba su voz tan amable, era autoritaria y ruda

-- Fred - Lo dije y no me sentí mal de ninguna manera - Fred Weasley - No es que el profesor le fuese a decir a alguien. Después de confesar quitó su mano de mi cuello; lastima se sentía muy bien

-- ¿Él te pegó? - Oh no, creo que todo se había malinterpretado. Quería seguir ahí encima de él sintiendo su calor, pero me paré y me dirigí hacía la mesa para sentarme encima de esta y quedar frente a él

-- No, él no me pegó, simplemente me mordió - Vi como estaba en su silla arqueando la ceja a tal confesión, no se veía muy contento al pararse y dirigirse hacia mí, se puso entre mis piernas y me observó un rato

No me contestó, su mirada se centró en mi camisa a la cual le desabrochó tres de sus botones no se veían completamente mis senos ,pero si se podían notar un poco - Ayer me sorprendió bastante que no usaras sostén - Su boca se dirigió a mi parte descubierta y empezó a chupar dejando marcas mucho más grandes y visibles que las anteriores, tenía que detenerlo si Fred veía esos enrojecimientos se iba a enojar mucho

-- Espera estás dejando marcas -- No me prestó la más mínima atención, y consiguiente a eso hizo más presión haciendo que estos en vez de rojos se viesen morados, maldición estaba muerta

Después de un rato de intentos fallidos para que no me dejara tales marcas, se separó de mi piel, vi y eran como cinco chupones más o menos. Sus ojos eran tan intensos y penetrantes que si con anterioridad iba a hacerle un show por las marcas ahora esas ideas habían desaparecido por completo, ahora veía sus labios esperando alguna señal para lanzarme sobre ellos y así fue, noté que se lamió el labio inferior y para mí era más que suficiente. Por fin, otra vez podía sentir lo embriagante que era su saliva, lo bien que besada, solo que ahora me causaba un poco de dolor por la herida de mi labio, sentí como su lengua chocaba con la mía moviendo esta circularmente haciéndome soltar leves suspiros yo solo podía acercarme a él y sentir su pecho y el mío casi desnudo chocar, me sentía tan bien en sus brazos, como me sostenía con fuerza y me besaba perversamente, pero esto no podía durar mucho

-- Me tengo que ir – Me separé para tomar aire; ya era hora de irme, Fred me estaba esperando y no quería que se enojara más de lo que ya estaba, su mirada se tornó bastante seria – Tengo algo que hacer, además mi castigo ya acabó – Abroché mi camisa con su mirada penetrante en mí y antes de irme le di un pequeño beso en la mejilla – Nos vemos mañana profesor

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Mis pasos eran bastante lentos, tampoco es que estuviese apurada en llegar a donde estaba Fred, tenía tiempo de sobra, me había despedido un poco antes de mi profesor ya que no podía llegar toda sudada y oliendo a él, por ello iba a aprovechar e ir primero a la sala común y echarme un poco de perfume

-- Oye, ¿Por qué te ves tan cansada, estuviste corriendo? – Me preguntó Cho ni bien llegara a la habitación -- Espera, ¿Qué tienes en el cuello? -- Mi cara de preocupación se veía de lejos, pero traté de disimular lo más que pude

-- Me picó un mosquito -- Respondí rápido y seco mientras me dirigía hacía mi cajón y sacaba la loción que esparcí por todo mi cuerpo

-- ¿Acaso ese mosquito lleva el nombre de Fred? -- Me puse bastante nerviosa, no, no era él pero obviamente no le iba a decir

-- Te digo la verdad, un mosquito me picó -- Dije bastante segura, no quería que ella dudara -- Me tengo que ir, ahora vuelvo

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Iba cuidadosamente a la torre de astronomía, deseando con tanta fuerza que no se diera cuenta de las marcas que tenía. Subí y ahí estaba sentado mirando por el gran ventanal que se encontraba allí.

-- Ey -- Dije haciendo presencia y supiese que ya estaba ahí

-- Oh, llegaste -- Todavía estaba enojado, ni siquiera volteo a mirar, solo contestó y ya. Me dirigí hacía dónde él y me senté a su lado, no me atrevía a decir nada -- Y bien, ¿Hoy por fin lo haremos o seguirás poniendo excusas? -- Ay por Merlín! ¿Qué se supone qué le diga?

-- Hoy no puedo, tengo mi regla -- Mentí, no quería hacer nada con él, si a él le parecía bien cómo iban las cosas hasta ahora está perfecto, si no lo acepta tampoco pensaría en rogarle. Su reacción fue totalmente serena, sí, fue bastante tranquilo que logró asustarme un poco 

-- Está bien linda, no te preocupes -- Qué bueno, no tenía muchas ganas de discutir; luego de aquellas palabras me tomó fuertemente acercándome a él -- Hueles bien -- Ay por Merlín, se está acercando mucho a mi camisa, ¿Qué haré? Pensé demasiado tarde, había soltado varios botones de mi camisa y ahora se encontraba mirando aquellas marcas, algunas rojas y otras más moradas -- No me acuerdo de haberte hecho eso -- Me miró, estaba totalmente serio -- O sea, yo te espero como imbécil y tú te revuelcas con otro, eres una... -- No terminó su frase, pero sabía muy bien lo que iba a decir, que maldito. Me tiró y caí en mis codos, raspando estos con el piso de aquel lugar, él salió dejándome en claro que no me quería volver a ver

-- Ay mierda! -- Me paré mientras me limpiaba el uniforme enojada, ¿Cómo se atrevía? Además, él y yo no éramos nada ¿Por qué putas se enojaría? La idea de hablarnos solo para algo íntimo era de él. Me fui muy enojada a mi sala, esperando calmarme a la mañana siguiente.

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Sé que estos últimos capítulos han estado con contenido +18, pero los que siguen serán mucho más tranquilos para enfatizar en la historia, aprovechen estos capítulos ya que no se verán en un buen tiempo. Besos, l@s quiero mucho ✨❣️