Quédate
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Sacaron a Sirius de la celda, salvaron al hipogrifo de Hagrid y Harry conjuró un patronus ¿Todo eso en un segundo? Era difícil de creer, pero todo era cierto
-- ¿*_* te sientes mejor? -- Preguntó Ron
-- Estoy mejor, pero sigo sin creer que tendré está cicatriz toda mi vida -- Se quedaron en silencio -- No se preocupen, aprenderé a vivir con ella
-- Ya te dieron de alta -- Añadió Hermione -- ¿Por qué no has ido a tu sala? -- Aunque esta ya tenía alguna idea de la respuesta, aun así, preguntó
-- Todavía no quiero que me vean así -- Los tres chicos me abrazaron -- Iré mañana, creo -- completé
-- Cho a estado preguntando por ti, está preocupada -- Harry habló
-- No le dijimos nada -- Habló apresurado Ron
-- Está bien, díganle que estoy aquí -- Lo último que dije, ya que estos se tenían que ir a clase
Aunque mi estado de ánimo estuviera un poco mejor, cuando nadie me veía y estaba completamente sola, lloraba; la marca que tenía era muy notoria, todos se burlarían de mí y si no fuese suficiente el hecho de que ya me molestaran por ser hijas de Muggles, tenían una razón más. Mi pie ya estaba mejor a veces me paraba para ver si podía caminar sin muletas, al menos ya lo estaba logrando.
-- Por favor señorita, ya hace tiempo que se puede ir -- Escuché la voz de Madame Pomfrey -- Sé que te resulta difícil, pero de algún modo lo tendrás que afrontar -- Solo asentía, mientras me sentaba en la cama de nuevo
-- ¡Por Merlín! -- Salté del susto ¿De quién era ese grito? -- ¿Qué te pasó? -- Miré a una preocupada Cho frente a mí -- ¿Quién te hizo eso? -- Parecía una muñequita en manos de la contraría que solo me movía de un lado al otro
-- Cho, déjala quieta -- Habló severamente la enfermera
-- Estoy bien, acompáñame a la sala -- Me paré e instantáneamente me agarró -- No exageres, puedo caminar por mi cuenta -- Aún me sostenía
De ida a la sala, todo lo que había estado pensando se volvió realidad "¿Qué le pasó en la cara?" "¿Le quedará para siempre?" "¿Fue un lobo?"
Era un poco desesperante escuchar todo eso, no me hubiese controlado si no estuviera Cho al lado, pero me sentía tan estresada que quería gritarles a todos que no era de su incumbencia lo que me pasara a mí.
-- Sabes, el profesor Lupin se va a ir -- Miré preocupada a Cho -- Hoy, seguro está empacando sus cosas -- No puede ser
-- ¿Por qué? -- Pregunté alarmada
-- Nadie sabe, solo decidió irse -- Seguramente pasó algo
-- Ahora vuelvo Cho -- Ella intentó detenerme, pero fue inútil
Aunque estuviera cansada y me faltaba el aire, no dejé de correr hasta llegar al salón de mi profesor, allí pude tomar aire y descansar un poco para luego subir las escaleras a su pequeña oficina
-- Profesor, no se puede ir -- Dije agitada -- ¿Por qué? -- le seguía preguntando, pero él no se atrevía a girarse
-- ¿Piensas que debería quedarme después de lo qué te hice? -- ¿Por qué lo sabía? ¿Quién se lo dijo? -- Dumbledore por si te lo preguntabas -- Nadie se debía de enterar
-- Solo fue un accidente, no te puedes ir -- Me acerqué lentamente a él -- Por favor, no se vaya -- Por fin se giró, pero su cara culpable al ver la gran cicatriz de mi rostro hizo que se girara de nuevo
-- Míreme -- Tomé su mano haciéndolo girar -- No te puedes culpar, fue solo un accidente -- Remarqué la última frase
-- Perdóname -- Agarró mi cara y con miedo y tocó las cicatrices que vio -- Arruiné tu hermosa cara -- Me tomó en sus brazos atrayéndome hacía él formando un abrazo
-- Estoy bien, los chicos dicen que no se ve tan mal -- Reí mientras con gran fuerza correspondía al abrazo -- No se vaya -- No sabía cuántas veces había repetido tal frase, pero hasta que él no se hiciera consciente de ella no iba a dejar de pronunciarla
-- Puede volver a pasar y eso sería horrible -- Se separó de mí y se quedó mirándome -- Aún con tal cicatriz, eres hermosa -- Imposible no sonrojarme con tal declaración
-- Yo puedo asegurarme que no vuelva a pasar -- Me veía incrédulo -- Se lo prometo, me aseguraré de que siempre tome su poción
-- Está bien -- Suspiré aliviada
-- Le tocará desempacar otra vez – Empezó a reír y yo solo me quedé mirando como ponía de nuevo las cosas en su sitio.
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-- ¡Por Merlín! ¿Cuánto llevan saliendo? – Miraba con asombro a Cho – Pero, solo tuvieron como dos citas
-- Sí, pero las dos nos gustábamos desde hace tiempo – Mi mirada no cambiaba
-- Está bien, mándale saludos a tu novia – Me burlé mientras veía como se iba para encontrarse con Ginny – Espero no te robé de mí – Dije sarcásticamente
Ambas chicas llevaban mas de una semana saliendo, no se separaban para nada, en algunas ocasiones Cho la metía a escondidas a nuestra sala y Ginny hacia lo mismo con esta; aunque no me molestara ya no tenía con quien hablar, era cierto que estaba Hermione, sin embargo, a esta no me la encontraba siempre y cuando platicábamos era muy poco o bueno, no tanto como lo hacia con Cho. Me ponía muy feliz la relación, y era obvio que no le iba a comentar nada de lo que estaba pasando por mi mente a ella.
Las burlas hacia mi rostro se volvían constantes, y si bien me podía aguantar en algunas ocasiones, en otras, para no utilizar mi varita me lanzaba directamente a golpear, por eso tenía mas de un rasguño en la cara o cuello, pero podía alardear que cada pelea la ganaba yo y que aquellas marcas que me dejaban no eran comparación con las del contrario.
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Imagínense que la cicatriz de la rayis es igual que la de Bill Weasley.
Perdón por no actualizar ayer, es que estaba tomando y llegué muy maluca a mi casa. Ahorita les subo otro capítulo. Que tengan un bonito día. ❤
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Secret
Fanfic(+18) Una Revenclaw hormonal de 16 años enamorada de su profesor de DCAO. · Leer bajo su propia responsabilidad. · Solo es ficción. · Hay contenido LGBT. 🏳️🌈 · Trío amoroso.