Lenguaje explícito.
Continuación del shot anterior.
Reíamos entre besos mientras trataba de no chocar con algo de la casa, una vez dentro de la habitación cerró la puerta y me dejó caer con cuidado en nuestra cama.
--- ¿En verdad quieres que tengamos un bebé? ---pregunté entre suspiros al sentir nuevamente cómo las bocas de sus manos besaban mi vientre.
--- ¿Tú no quieres? ---preguntó.
--- Sí, solo no creí que tú quisieras. ---murmuré.
--- Quiero formar una familia contigo, Saori. En verdad lo deseo.
No dije nada más y me dejé deleitar con tus besos. Las bocas de sus manos besaban cada parte de mi vientre mientras mi esposo bajaba sus besos a mi clavícula y pechos.
--- ¡Deidara! ---reproché en el momento en que rasgó mi blusa, partiendola en pedazos. Rió.
--- Después te compro otra. ---dijo con simpleza. Tomó los costados de mis shorts e hizo lo mismo.
Este hombre me dejará sin ropa próximamente.
--- Eres preciosa, Saori. Toda una obra de arte. ---dijo besando por encima de mi sostén. Lo tomé de los hombros e hice que quedara debajo de mí.
Sonreía con malicia. Él sabe lo que provoca.
Ante su mirada retiré lentamente mi sostén. No tardó en tomarlo con sus manos, apretandolos y dejando que las bocas hicieran su trabajo.
Me incliné levemente hacia su rostro, besándolo mientras comenzaba a moverme lentamente encima de él. Sin prisas, comencé a desabrochar su camisa, pasando mis manos por su pecho. Me sujetó de las caderas marcando el ritmo de mis movimientos mientras suspiraba y gemía en mi oído.
--- Quítate la camisa. ---susurré. Me incorporó bien en su regazo y rápidamente se despojó de aquella camisa.
--- Te amo. ---susurró en mi oído para después besarlo. De un momento a otro volvió a dejarme abajo de él. Tomó los costados de mis bragas y al igual que mi blusa las rasgó en pedazos.
Iba a reprocharle pero me calló al sentir como la lengua de su mano, me besaba ahí abajo. Deidara tenía una sonrisa de satisfacción en el rostro mientras movía lentamente su mano y con la otra se despojaba de sus pantalones, quedando en ropa interior.
--- Dei...
--- ¿Se siente bien? ---asentí.--- No te oigo, amor.
--- Deidara... por favor.
--- ¿Por favor, qué? ---preguntó burlón.
--- Y-Yo... ¡mierda! ---gemí al sentir cómo mordió levemente.
--- Deja que mis manos te consientan un poco.
Lentamente comenzó a meter dos dedos mientras la boca de esa mano se dedicaba a besar mi punto más sensible. Me sentía tan vulnerable ante él, sentía como se hacía un nudo en mi vientre y mis piernas comenzaban a temblar.
En definitiva, Deidara es excelente masturbando durante el sexo.
Besó castamente mis labios.
--- Te toca. ---susurró sentándose en el colchón, apoyando su espalda en la cabecera. Me incorporé a un costado de él.
Su erección estaba cubierta por la tela de su ropa interior y se acariciaba lentamente por encima de ésta, provocandome. Me guiñó el ojo para después bajarse los boxers, sacando su erección.
--- Ayúdame un poco, cariño. ---dijo con una voz ronca que me volvía loca. Su mano comenzó a mover moverla de arriba a abajo sin dejar de verme.
Con su mano libre, me tomó de la mano acercándome un poco más a él. Sustituyendo su mano con la mía, ayudándome a marcar el ritmo.
