𝑶𝒏𝒆 - 𝑺𝒉𝒐𝒕 [𝑯𝒂𝒋𝒊𝒎𝒆 𝒏𝒐 𝑰𝒑𝒑𝒐]

Takeshi Sendo

Takeshi Sendo, ¿un idiota con gran carácter o un niño que intenta sanar? De cualquier forma lo amabas, ambos se conocían desde pequeños, desde el incidente con su padre…tu siempre lo invitabas a jugar.

— Nana…¿Puede Sendo ir a jugar conmigo? —Eras algo pequeña, pero aún así abrazabas tu peluche de un tigre, Sendo lo había conseguido en una máquina de peluches para ti. Esperabas que su abuela te diera el permitido de dejarte ir con él.

— ¡________! —Exclamo mientras se acercaba a darte un gran abrazo, su abuela asintió dejándolos ir, aunque pidiendo que ambos tengan cuidado.

Siempre jugaban, reían y se tomaban de las manos, les gustaba jugar en el arenero, Sendo era el rey eso equivalía a qué tu eras la reina, así era como lo planteaba el pequeño Sendo, él era demasiado dulce contigo.

— Sendo, ¿Creés que Rocky esta bonito? —Cuestionaste mientras le mostrabas tu peluche, el asintio con una sonrisa.

— ¡Si! Pero tu eres más bonita —Supongo que los niños no mienten, ¿no? Sendo era un amor, pero un día todo cambió.

Te encontrabas llorando junto a tus amigos y Sendo, unos niños mayores que ustedes los habían molestado, a tí te quitaron tu peluche, cosa que hizo que Sendo se metiera a defenderte, cosa que fue en vano. Ambos fueron llorando hacia donde su abuela, tú tomabas su mano llorando.

— Lo siento Sendo, si te hubiera defendido no te habrían golpeado y no me hubieran quitado a Rocky —Sollozabas mientras tomabas su mano, el te veía preocupado, trataba de no llorar para ponerte peor— Tu te esforzaste por conseguir a Rocky y yo lo perdí.

— No llores _____ —Murmuro mientras te abrazaba— ¡No es tu culpa! ¡Te prometo que me haré fuerte cómo mi papá para protegerte a ti y al resto!

Ese día todo cambió, el carácter de Sendo cambió, al día siguiente el persiguió a los niños con un bate, te pidió que lo acompañaras a su casa.

— ¡Cierra los ojos! —Exclamo, asentiste para tapar tus ojos con tus manitas, Sendo fue en busca de algo dejándote sola en su casa, oías sus pasos apurados detenerse frente a ti— Abre los ojos —Obedeciste quitando tus manos con lentitud, frente a ti estaba el extendiendote aquél peluche que habías perdido.

— ¡Rocky! —Exclamó la niña lanzándose sobre el contrario en un abrazo, definitivamente Sendo era alguien especial para ti.

Ambos comenzaron a crecer juntos, el se volvía popular por sus peleas, ayudando a todos, mientras tu también al ser la única con la que Sendo pasaba horas y no rechistaba al momento en que le dabas un golpe o lo regañabas.

— ¡Te dije que no te metieras en esa pelea! —Lo regañabas mientras curabas sus heridas, él soltaba quejidos en silencio— Los golpeaste solo porque te vieron y se rieron…Entiendo que te molestara, pero mínimo lo hubieras hablado.