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Narra T/n.

17/09/2017

Otra vez el sonido de esa ruidosa alarma...

— Mmmh, cariño apaga eso. Hoy es sábado... — Dice mi esposo mientras se removía en la cama adormilado. Reí levemente en el mismo estado que él y apagué aquel ruido tan molesto.

— Igual tienes que levantarte, recuerda que quedaste con tu amigo.

— Es muy pronto... — Me encanta cuando se pone así, sonreí al verlo quejarse como un pequeño niño.

— Keisuke, tienes que levantarte. — Al instante que escuchó su nombre abrió los ojos.

— Vale, vale, ya me levanto. — Se acercó a mí, aún medio dormido, y me dio un corto beso de buenos días.

Ambos ya cumplimos los 27-26 años. Sí, me fui a mi país de nacimiento pero cuando cumplí los 19 volví a Japón y encontré trabajo, en un café de mesera. Nunca perdí el contacto con ninguno de mis amigos, excepto Manjiro y Emma.
Emma me dejó de hablar de la nada y de Mikey no sé absolutamente nada.

En cambio Baji hablaba todos los días conmigo, me daba los buenos días e incluso las buenas noches, cuando éramos unos críos, claro.

Empecé a desarrollar sentimientos por él a los 16, hasta que llegué aquí y le confesé mis sentimientos. Él se puso realmente feliz, lo notaba en sus ojos, unos años después me pidió matrimonio.
Lo más extraño es que Baji tampoco sabe nada de su amigo Mikey...

Fui a la cocina donde se encontraba Baji preparando el desayuno, estaba tan concentrado que se veía muy lindo.

— Está noche pensé en llevarte a un bar, ¿qué te parece? — Él siempre tan romántico...

— ¿Y esa idea? — Reí mirándolo.

— ¿Qué? ¿No te gusta? — Acabó de hacer las tostadas y las puso en unos platos. Le ayudé a llevarlos a la mesa y nos sentamos. Me parecía muy linda la idea que tuvo, pero, ¿un bar por la noche?

— No es eso, lindo. Sólo no estoy acostumbrada a ese tipo de sitios. — Miré a otro lado. Es verdad, casi nunca voy a esos sitios solamente con Baji y con Chifuyu de vez en cuando.

— Si quieres podemos... — Le interrumpí antes de que dijera otra palabra.

— No, no, está bien así. — Después de hacer nuestra rutina de por la mañana, salí de casa para comprar algunas cosas necesarias.

Me entretuve mucho, tanto que incluso tenía algunas llamadas perdidas de Keisuke. Le contesté los mensajes para que no se preocupara, también me comunicó que Chifuyu había venido de visita para vernos.
De camino a casa hubo un local que me llamaba mucho la atención...

Tenía aspecto de discoteca, también presentaba muchas luces de colores llamativos. Al instante pensé una idea.

¿Y si vamos allí esta tarde en vez de a un bar?

Para mí es una buena idea. Llamé a mi esposo de camino, prefería decírselo cuanto antes para saber su opinión.

— ¿Pasó algo, cariño? ¿Quieres que vaya a buscarte?  — Dijo con un suave tono de voz.

— Oh, no, no te preocupes, amor. Sólo era que... — Antes de que dijera una palabra escuché a cierto rubio hablar de fondo, causándome una leve risita.

— No le hagas caso. — Rio también.

— Bueno, vi un local para salir esta tarde. Creo que es nuevo y podríamos ir a visitarlo. — Podía escuchar a Chifuyu diciendo, "¿qué tipo de lugar?

˗ˏˋ 🍇 ˎˊ˗  ⌗ ⋆ 𝐄𝐒𝐄 𝐏𝐀𝐍𝐃𝐈𝐋𝐋𝐄𝐑𝐎 ⋆‧₊˚๑ ▬▬▬  𝘔𝘢𝘯𝘫𝘪𝘳𝘰 ‧₊˚๑Donde viven las historias. Descúbrelo ahora