Un Tutor Increíble -Gotoubun No Hanayome-

Capitulo 1

-El plato Yakiniku sin la carne, por favor-, preguntó un joven con el pelo negro desordenado a la anciana de la cafetería.

La señora sonrió, mientras le daba el plato con la carne, -Fuu-chan, sabes que necesitas comer más para estar saludable. Tu mamá estará preocupada si no comes lo suficiente.- Dándole un poco más. 

El joven sonrió, -Lo sé, pero me siento un poco culpable por recibir esta bondad de ti. Gracias de todos modos.-

Se fue con su bandeja de almuerzo para buscar una mesa libre en la cafetería. El mejor estudiante de la escuela secundaria Asahiyama conocido como Uesugi Fuutarou notó algunas miradas de sus compañeras de clase que significaban solo una cosa: -Ven aquí a almorzar con nosotros, Fuutarou-kun-.

Fuutarou, sonriendo, miró hacia esas chicas y les guiñó un ojo. Tal acción fue suficiente para hacerlos sonrojarse y reírse al recibir su atención. Sabían exactamente lo que significaba ese guiño.

-Fuutarou-kun quiere estudiar solo de nuevo. Ojalá comiera conmigo-.

-Le pides demasiado a Mari-chan. Sabes que a Fuutarou le gusta ser el mejor en esta escuela mientras ayuda a los demás-.

-¿Y qué? Me gusta la amabilidad de Fuutarou-kun. ¡Él también es guapo!-

Su charla era cierta. El estudiante llamado Uesugi Fuutarou no solo era el mejor con las mejores calificaciones, sino que también tenía un cuerpo agradable y tonificado acompañado de hermosos rasgos faciales que lo convertían en el chico más hermoso de la escuela.

Finalmente, el joven encontró una mesa libre sin estudiantes y colocó su bandeja de almuerzo que se estrelló contra otra. Aturdido, Fuutarou levantó la vista para ver a una hermosa joven con horquillas de estrellas, cabello rojo y un lindo ahoge que lo miraba sorprendida.

Fuutarou miró sus dulces ojos azules y dijo: -Tan hermosa-. Su frase fue suficiente para hacer que la chica pelirroja se sonrojara como su cabello y las chicas que lo miraban fruncían el ceño.

Presa del pánico por su reacción, Fuutarou tomó su bandeja de almuerzo y gritó: -¡Lo siento, fui grosero! ¡Me iré y te dejaré esta mesa!-

Pero antes de que pudiera irse, una mano tomó su manga derecha. Se dio la vuelta y vio a la joven agarrándolo del brazo. Ella dijo, sonrojada, -T-tu n-no tienes q-que irte. P-podemos comer juntos.-

Al principio confundido, la expresión de Fuutarou cambió en una sonrisa. -Claro-, respondió.

La joven se sonrojó aún más al ver su sonrisa, pero rápidamente se sentó en el asiento frente al que Fuutarou había tratado de conseguir. Ambos rezaron con el tradicional -Itadakimasu- y comenzaron a comer.

Mientras comía su plato Yakiniku, Fuutarou echó un vistazo a la bandeja del almuerzo de la joven. Se sorprendió al ver tempura, camarones fritos, fideos y un postre también.

-Debe ser alguien que come mucho. Pero ella es realmente hermosa-, pensó, sonriendo.

La chica frente a él notó su mirada en su comida y preguntó: -¿Por qué están mirando mi bandeja de almuerzo si puedo saberlo?-

Atrapado en el acto, Fuutarou respondió: -Estaba echando un vistazo porque me pareció lindo que una buena chica como tú pueda comer tanto jaja-.

Una vez más, la joven se sonrojó ante sus palabras. -¡Me llamó hermosa y linda! ¡Ah, por qué me hace tan feliz escucharlo!-

-Por cierto, no me presenté. Mi nombre es Uesugi Fuutarou. Encantado de conocerte-, le dijo, interrumpiendo sus pensamientos y ofreciéndole la mano para un apretón de manos.