Un Tutor Increíble -Gotoubun No Hanayome-

Capitulo 10

-¡¿Ehhh ?! ¿Onii-chan va a tener una pijamada con Itsuki-San y sus hermanas esta noche?-, gritó Raiha en voz alta mientras hablaba con su hermano en su casa.

-No seas tan ruidosa, Raiha. Es solo una propuesta que Ichika hizo para revisar todo mejor para los exámenes parciales de mañana jaja-, le dijo Fuutarou, dándole palmaditas en la cabeza.

De hecho, los dos hermanos Uesugi estaban hablando del hecho de que el joven de ojos dorados iba a tener una pijamada con las quintillizas en su apartamento, a lo que accedió sin ningún problema, ya que estaba seguro de que darles tutoría un poco más de lo habitual les ayudaría a estar más preparadas para los exámenes. Obviamente sabía que iban a tratar de tener su atención en ellas, ya que les había descrito su tipo ideal de chica. Y no le importaría en absoluto.

-Wow, así que Onii-chan dormirá en su casa-.

-Sí, también cenaré allí, para que tú y mamá no tengan que preocuparse por mí esta noche-, respondió con un guiño.

-Oh, ok Onii-chan. ¿Tienes todo lo que necesitas en tu bolso?-

El mejor estudiante se rió entre dientes y le mostró el contenido de su bolso, que incluía cuadernos, algo de ropa, un cepillo de dientes, una toalla y algunos bolígrafos y lápices. -¿Ves? Tengo todo, así que no hay necesidad de preocuparse-

-Jeje, me preocupo mucho por ti, Onii-chan, al igual que tú lo haces por mí y mamá-, respondió ella, abrazándolo también. Fuutarou la abrazó y le dio unas palmaditas en la cabeza, haciéndola reír.

-Lo sé, Raiha. Muchas gracias-, le dijo, recibiendo una sonrisa brillante como respuesta. Y después de eso, el joven decidió irse para llegar al apartamento de las quintillizas mientras saludaba a su hermana.

Tan pronto como salió de su casa, el chico salvaje de cabello negro comenzó a pensar en algo en particular: -No sé qué debo esperar de ellas mientras esté allí, pero seguramente todas tratarán de tener mi atención en ella. Cuando les dije lo que me gusta en una chica estaba diciendo la verdad; Me siento realmente atraído por ellas después de todo. Y su interés en mí es bastante evidente si cuento todos los abrazos que Yotsuba me dio y las invitaciones de sus hermanas para pasar el rato conmigo. Jaja, tal vez ahora mismo papá está orgulloso mientras me cuida. Supongo que llevare pasteles para comer como postre, harían muy felices a Yotsuba y a las demás-.

Así que Fuutarou decidió detenerse en una pastelería antes de llegar al departamento, una tienda donde también había trabajado a tiempo parcial hace un año: "The Revival". La tienda fue, de hecho, uno de los primeros lugares donde había trabajado a tiempo parcial, haciéndose amigo también del propietario, Kuri. Fuutarou también lo ayudó a reunirse con la mujer dueña de la panadería frente a su tienda, Nagisa, que estaba enamorada del hombre de mediana edad. Esta amable acción de Fuutarou fue muy apreciada por la pareja, y Kuri le había prometido que siempre le daría un descuento cada vez que viniera a comprar algo. Y esta ocasión fue una de esas.

Unos minutos más tarde, después de hablar con Kuri y Nagisa y comprar varios tipos de pasteles, el joven llegó al departamento y envió un mensaje rápido a Itsuki para avisar que había venido. En menos de un minuto la puerta de cristal se abrió y entró para usar el ascensor.

Llegó al piso de su apartamento y llegó a su puerta, golpeando suavemente. Fue abierto instantáneamente por una conejita que sonrió brillantemente cuando vio a Fuutarou.

-¡Hola, Fuutarou-kun!-, Ella lo saludó alegremente, envolviéndolo en un agradable abrazo.

-Hola Yotsuba. Me alegro de verte de nuevo. ¿Estás lista para estudiar? Compré algunos pasteles para comer durante la cena más tarde-, le dijo, acariciando su cabeza con amor.