Maratón de Luffys al máximo 3/3

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Aquello que alguna vez prometí

La guerra de Wano había finalizado y el amanecer finalmente llegó a la tierra de los samuráis. Monkey D. Luffy, con una recompensa de tres mil millones de berries sobre su cabeza, ahora era considerado uno de los cuatro emperadores del mar.

El capitán mugiwara y su tripulación, partían rumbo a su siguiente destino.

La tripulación estaba en nada más ni nada menos que en Laugh Tale, y el capitán debía luchar contra Barba Negra para que se decidiera de una vez por todas quién era el merecedor del One Piece.

—Es bueno verte de nuevo, Luffy. —Shanks le dio un trago a su vaso de sake, aún seguía sobrio. El chico más joven soltó una risita.

—Yo te extrañé —fue lo que dijo.

El hombre pelirrojo estaba sentado en el pasto, de piernas cruzadas; enderezó su espalda y alzó su vaso.

—Brindemos por otra promesa cumplida.

Luffy, también sentado en el pasto, alzó su vaso y ambos brindaron con sake, esta vez no para hacer una promesa, sino por haber cumplido una.

Luffy desvió su mirada de Shanks y su vista se perdió en el horizonte, en el mar.

—Eres un gran pirata, Luffy —dijo el pelirrojo.

El chico captó que era el momento de cerrar de una vez por todas su promesa, así que se quitó el sombrero y lo extendió frente a Shanks.

—Te dije que lo haría, que yo sería el rey.

Y allí, en la cima de aquella montaña que daba vista al mar, Shanks y Luffy habían vuelto a reunirse una vez más para brindar con sake.

Luffy ya le había entregado el sombrero a Shanks, después de todo, sólo lo estaba cuidando hasta cumplir su promesa. Pero, fue difícil entregarlo, ya era un parte importante de él, hasta era el nombre de su tripulación, ¿por qué deberían seguir llamándose "Los Sombrero de Paja" si ya no lo tenía?

Shanks notó como Luffy daba rápidas miradas a su cabeza, era claro qué era lo que miraba. El sombrero era igual de importante para los dos, venía de alguien que respetaban mucho. Pensó que ambos aún podían tener una parte de él. Desató con cuidado el lazo rojo que rodeaba el sombrero y lo entregó a Luffy.

—Tómalo como un recuerdo —Shanks le sonrió.

Un rato después de esa conversación, Luffy se levantó del suelo, le dio la espalda a Shanks y se fue caminando tranquilamente, hasta finalmente llegar con sus nakamas. Ellos le saludaron muy felizmente y Luffy les correspondió.

Todos en el barco estaban teniendo una agradable celebración. Luffy le dedicó una sonrisa a Nami que estaba cociendo un nuevo sombrero a petición suya.

Zoro, estaba sentado por ahí bebiendo sake, hasta que sintió a alguien detrás de él. Giró su cabeza y vio a su capitán, quien se acercó a su oído y con una voz profunda y sensual le susurró:

—Zoro —el nombrado sintió un pequeño escalofrío—, ya podemos hacer lo que me habías pedido.

Zoro no tardó en entender a lo que se refería Luffy y enseguida sonrió. Se dio la vuelta por completo y miró a Luffy con determinación.

—Vamos a patearle el trasero al gobierno mundial.

—¿Entonces esa es nuestra próxima parada? —había preguntado Nami.

Luffy asintió.

—Es una orden.

Nami sonrió.

—Como usted diga, capitán.

Imaginación al máximo [One Piece One-shots]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora