O6

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—¿En verdad te invito a su casa? —Jungkook elevaba ambas cejas en sorpresa, nunca pensó que Jimin tendría tan sólo una pizca de éxito, en realidad pensaba que Yoongi lo mandaría a volar en cuanto le empezará a hablar, pero no fue así, cosa que definitivamente le sorprendía.

Jimin le regalo una sonrisa a su amigo mientras daba frenéticos asentimientos con la cabeza.

—Créeme, ni siquiera yo pude creer lo que paso —soltó una risa corta—, pero es perfecto, quiere ayudarme con mi ensayo de química, será el momento perfecto para continuar con la apuesta.

Jungkook sonrió sin ganas al escuchar eso, aunque Jungkook no lo quisiera, le afectaba en sobremanera esa apuesta, porque él tenía la certeza de algo que seguramente todos en la escuela no se daban cuenta, y era que sabe que Yoongi al parecer muy en el fondo deseaba una pareja, había muchas veces en las que el alfa sin querer llevaba su mirada hacia aquel omega, sobre todo lo hacía cuando empezaban esos murmullos llenos de burlas y comentarios espantosos hacia el omega, Jungkook no puede evitar que su mirada caiga en Yoongi, y sin querer le había prestado atención quizás más de la que debía.

Pero esos avistamientos le pudieron dar mucha información del omega, sabía que Yoongi prefería más leer que comer su almuerzo, sabía que Yoongi sonreía de vez en cuando imperceptiblemente cuando estudiaba, arrugaba levemente su ceño ante los problemas de matemáticas cuando se concentraba, sabía que Yoongi amaba disfrutar de cualquier bebida mientras leía, pero su favorita al parecer siempre era un jugo de manzana, se percato de que sabe que hablan a sus espaldas de él, y por sobre todo, Yoongi de vez en cuando veía a las parejas que había por toda la institución y siempre que lo hacía no podía evitar agachar la mirada y sonreír con tristeza al verlos, eso fue lo que más había llamado la atención del alfa. Por eso estaba en contra de que molestaran al omega con algo como eso, enamorar a ese omega, significaba ilusionarlo, y aunque sabe que alguien como Yoongi no es una persona fácil, tiene miedo de que caiga, porque sabe que cuando se entere de todo llorará y no quiere estar presente para ese momento, vivir el dolor de un corazón roto no es nada grato.

—Park —Jungkook detuvo sus pasos.

—¿Sí? —Jimin de igual forma detuvo sus pasos.

Jungkook inhalo profundamente el aire para retenerlo por unos segundos y después exhalarlo en un largo resoplido, dirigió su mirada hacia Jimin y apretó ligeramente sus labios.

—Escucha —comenzó a decir Jungkook—, sé que Yoongi es una apuesta para ti y que todo terminará cuando obtengas lo que quieres —Jimin dio un asentimiento—, pero por favor, prométeme que no lo lastimarás... o al menos intenta alejarte de él cuando todo acabe.

—¿Por qué te preocupa? —Jimin estaba intrigado, usualmente a Jungkook no le importaban las personas involucradas en sus apuestas—. Es extraño, jamás te habías puesto tan en contra de una apuesta, y ahora...

—Sólo promételo.

—¿Por qué? —Jimin sonrió ladino—. ¿Te gusta ese omega?

Jungkook no respondió, solamente aparto la mirada.

—Me guste o no —dijo después de unos segundos de silencio—, promete que no le harás daño.

—Es solo un omega, Jungkook —el mencionado apretó los dientes al escuchar eso—, lo superará tarde o temprano, Min Yoongi es como una piedra, dudo mucho que mis acciones lo lastimen.

—¿Una piedra? —mascullo Jungkook por lo bajo—. ¿Eso es lo que piensas?

—¿Qué?

—Habla, Park —Jungkook miro a su amigo, su ceño estaba fruncido, no podía creer lo que estaba escuchando—, ¿desde cuando una persona no tiene sentimientos? ¿Acaso crees que Yoongi es alguna clase de máquina sin corazón?

—Es obvio que no lo es.

—Entonces no digas que es una piedra —gruño Jungkook por lo bajo—, todo ser humano tiene sentimientos y debes de considerarlos —Jimin rodo los ojos al escuchar eso.

—Ya lo sé —dijo en tono golpeado—, no soy un niño para que me expliques esas cosas —volvió a rodar los ojos—, sólo pienso que ese omega no es tan tonto como para pasársela llorando por meses por lo que haré, quizás hasta se desquite conmigo con una bofetada, puede que inclusive me insulte —se encogió de hombros restándole importancia—, pero eso será todo, olvidaremos el asunto, Yoongi volverá a su solitaria vida y yo obtendré el premio principal, será sencillo.

—Sí eso crees —Jungkook comenzó a caminar de nuevo, pero Jimin no le siguió el paso—, sólo... —miro por sobre su hombro a Jimin—, no lo hagas creer que amar es una mentira, ¿bien?

Dejo de mirar a Jimin para seguir con su camino, estaba preocupado por Yoongi, no quería que pensase que enamorarse o confiar en una persona sería la peor decisión en su vida, esperaba que Jimin no le hiciera sufrir, no más de lo que ya estaba sufriendo.

Mientras se alejaba, Jimin lo miraba de lejos ir haciéndose cada vez más pequeño en la lejanía, el alfa no entendía porque tanta insistencia de parte de Jungkook, era increíble, jamás lo había visto tan preocupado como ahora por alguien, mucho menos por un omega, a Jungkook no le importaban mucho los omegas, si buscaba a uno era solamente para pasar sus celos, pero eso era todo, y ahora que prácticamente le pidiera que no lastimará a Min Yoongi... parecía inclusive que ese alfa que hace unos momentos caminaba a su lado no era Jungkook, sino una persona totalmente diferente, es extraño.

De todas formas, Jimin no tiene la intención de hacerse tan cercano a ese omega, solamente lo necesario para obtener la aprobación de ese omega y así obtener el estúpido "me gustas, alfa" para demostrar que había logrado que ese omega con corazón de piedra y alma más fría que la Antártida, había caído enamorado de él, eso era todo, no pasaría nada más, no es como si Jimin considerase la opción de que pasará algo más, porque no, ¿quién querría estar con Yoongi? La sola idea le daba escalofríos, pues Min Yoongi no estaba ni siquiera cerca de sus estándares de un omega perfecto.

Jimin siempre ha tenido en mente como quiere que sea su omega perfecto, su físico tenía que ser delicado, su piel debía ser suave y sedosa, debía tener el cabello castaño oscuro, unos ojos que le invitaran a sonreír a cada momento, debía tener una actitud dulce y llena de bondad, alguien que siempre quisiera estar a su lado y que jamás le mirase con indiferencia, quería un omega que solamente tuviera ojos para él, y no dudaría en corresponderle de la misma forma, pero ese omega aún no llegaba, y Min Yoongi, ni siquiera estaba cerca, Yoongi tenía una piel blanquecina, pero dudaba mucho que fuera suave, sus cabellos eran negros como la noche y siempre los llevaba desarreglados, sus ropas lo hacían ver como alguien que se quedo atrapado en los años sesenta, esos lente no le favorecían a su rostro, y esos ojos gatunos no tenían nada de lindos, mucho menos con esa actitud suya arisca, gruñona, irritante, y grosera, ¿acaso ese omega no sabía como ser un omega? Por lo visto no, y Jimin no estaba dispuesto a enseñarle como, porque era ridículo hacerlo.

Jamás se enamoraría de un omega como Min Yoongi.

Y con ese pensamiento, siguió su camino, sintiéndose estúpido por haber pensado en la posibilidad de enamorarse de un omega sin gracia como Yoongi, la idea era tonta.

Beautiful  ||JimSu||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora