10

2.2K 250 19
                                        


Encontré un lugar donde me puse a trabajar para el regalo de Takemichi.

Shinichiro me contó la historia de los motores gemelos que había encontrado. Fui encontrando las piezas de la otra babu y las fui armando. Algunas se las lleve a un mecanico para que me ayudara.

Una llamada me alertó.

Fui corriendo al hospital para ver a Takemichi con un yeso en su brazo.

- Qué te pasó? Alguien te hizo daño? Quién lo hizo?

-Tranquilo Mikey-kun. No fue nadie. Me tropeze queriendo alcanzar un dvd y me caí. -Me dijo Takemichi mirándome y me sonrió.

No se que haría si le pasara algo malo.

Lo miré mal mientras cargaba sus cosas.

- Ya se que no me harás caso, pero ese trabajo... te tratan mal. No entiendo como sigues.

-  No quiero abandonarlo, me gusta mucho las peliculas. Me gustaría algún día ser el gerente.

- Pero debes tener más cuidado.

- Lo tendré-me dijo sonriéndome.

Lo acompañe hasta la puerta, y le pregunté si podría llevarlo a su departamento. Generalmente nos juntabamos en mi casa, así que sería la primera vez que conociera su departamento.

- Es un departamento pequeño. Me mantengo con ese trabajo- Se río - Antes de conocerte, no era muy ordenado. Digamos que... no tenía muchas ganas de nada. Ni energía ni me sentía feliz.

Lo miré.

- Pero ahora soy muy feliz y estuve intentando ordenarlo. No es perfecto pero es cómodo. -Dijo Takemichi

Ahora que lo pienso, desde que lo conocí  antes tenía ojeras y ahora no veo ninguna.

- No importa si esta ordenado Takemitchy. Quiero verlo, siempre vienes a mi casa así que me lo debes.

Takemichi me miró.

- Parece que vives más en mi casa que en tu departamento.

No se ni como dije eso, pero Takemichi se sonrojo.

- Bueno, me siento cómodo en tu casa. Es muy linda y espaciosa comparada con la mía. Además... me gusta tu compañía.

Mi corazón se aceleró.

-  También me gusta tu compañía. -sonreí- Estuve trabajando duro después de separarme de Kisaki. Takemitchy, que hay de tus padres?

Takemichi miró al frente.

- No lo se. Supongo que mi mamá esta bien. Hace mucho que no me habla y la verdad ya no me importa.

Lo miré. Se notaba que estaba triste. Me acerqué más a él, puse una mano sobre su hombro y lo acerqué un poco más a mi.

- Gracias. -Me respondió.

Caminamos juntos a su departamento. Hacía frío, así que el pequeño abrazo nos hizo calentarnos un poco. Y su calidez me abrazó.

Cuando entré vi que era un departamento más pequeño que el mío. Estaba ordenado aunque aún había cosas desordenardas.

Takemichi se saco su abrigo y fue a buscar algo. Yo mientras recorría su sala. Había un poster de una banda, algunos de unas motos y un rompecabezas.

Él llegó con un regalo. La caja era roja y tenía un lazo verde.

- Eh?

- Toma, es para vos. Ábrelo. -me dijo sonriéndome.

Extraños. MaitakeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora