Call Me what You Want • Shinkami

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Un salto hacia atrás para esquivar, uno más para el ataque. No puede hacer mucho, sería más sencillo con los localizadores, pero la idea de este entrenamiento de dones era usarlos sin equipamiento, pero es injusto, ¿qué tan difícil puede ser para Bakugo atacar sin su equipo?

—No es escapes. Ven aquí idiota.

—¿Me puedo rendir? Es de sabios reconocer cuando no vas a ganar.

—No, y sabré si lo haces. Si no quieres que te baje puntos, más te vale que no lo hagas —lo amenazó Aizawa, que debía supervisar la clase de entrenamiento de dones.

Kaminari sabía que las relaciones con los suegros eran complicadas y tan comunes que son tramas de muchas películas, pero es totalmente diferente reírte de lo que se ve en las pantallas a vivirlo. Contaba con que Aizawa sería imparcial y no lo había puesto contra Bakugo a propósito, solo una buena acción para desarrollar su quirk y ser un futuro mejor héroe.

—¡¿No te cansas?! —le gritó a Bakugo. Él también estaba cansado de solo esquivar, pero no quería atacar sin planear bien su ataque y solo desperdiciar su carga.

—No hasta que acabe contigo —dijo Bakugo amenazante sin dejar de lanzar explosiones, sus brazos comenzaban a dolerle pero no debía darle tiempo a Kaminari para pensar, lo malo es que era muy rápido y no había podido golpearlo directamente.

"No me puedo rendir, pero tampoco puedo alargar más la pelea. Bakugo mejoro mucho su resistencia y si espero a que llegue a su límite yo también me cansaré y es más probable que me golpeé, después de tanto esfuerzo debe estar cubierto en sudor" analizó mientras seguí esquivando, se distrajo lo suficiente como para resbalar, pero no se cayó.

—¡Vamos Kaminari! —gritó Mina, más asustada que emocionada.

Bakugo estuvo muy cerca de explotar a Kaminari cuando resbaló. Hubo un segundo en el que ambos se vieron como en cámara lenta.

Este era el momento. Kaminari apretó los puños preparando su carga, la electricidad comenzó hacer brillar su cuerpo y su cabello comenzó a levantarse. Se giró a mirar a su profesor y compañeros, muy orgulloso de lo que había logrado: una ventana para atacar con todo su poder a Bakugo.

Hubiera sido un momento glorioso en su historia escolar si no se hubiera distraído mirando al chico a lado de Aizawa.

Hitoshi estaba ahí, usaba su uniforme y hablaba con Aizawa, ambos se veían molestos, como si estuvieran en una discusión silenciosa. Cuando sintió la mirada sobre si, lo único que alcanzo a ver Hitoshi era como Bakugo se reimpulsaba con una explosión tratando de esquivar el ataque de Denki, algo que no le había costado mucho pues Denki no alcanzo a tocarlo, ni siquiera había visto hacía donde estiraba la mano.

El gran impacto de las particularidades hizo una onda de aire y esparció el humo.

Kaminari estaba en el suelo, con los brazos y las piernas extendidas, y la mirada perdida en el cielo, con la misma expresión que ponía cuando se sobrecarga. Bakugo había rodado, cayó sentado pero se levantó tan rápido como pudo, se colocó en posición de pelea pero se relajo al ver el estado de Kaminari.

—Ha, gane

—En lugar de celebrar, ayudame a levantarlo —pidió Mina. A los segundos llegó Kirishima y levantó a Kaminari como si se tratara de un pedazo de tela.

Sero comenzo a preguntarle cómo se sentía y Kaminari solo levantó su pulgar.

—¿Estás bien Bakugo? —preguntó Kirishima a la vez que dejaba a Kaminari en la camilla para que lo llevarán a enfermería.

"Por supuesto que está bien" pensó. Sentia que el mundo comenzaba a darle vueltas, estaba muy cansado, podría descansar un rato en lo que pasaba su sobre cargar, pero aún entre las voces de sus amigos y las palabras dulces de Recovery girl, quería ver a Hitoshi.