Parte 1

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Abro mis ojos cuando siento ese golpe de las llantas al tocar el asfalto, subo más el volumen de mis cascos al escuchar la voz del piloto al dar la "bienvenida" al aeropuerto.

Me vuelvo a acomodar en mi asiento, total tanto apuro por salir de este avión no tengo y es que incluso se me hace super tonto y absurdo estar empujándote con los demás pasajeros por salir primero, pero bueno ya tendrán apuro después de más de 1o horas de vuelo, más aún la vieja odiosa que viajo a mi lado, vuelvo a cerrar mis ojos al verla luchar con sacar su bolso del compartimiento, pero eso me da igual, por mí que se siga jodiendo

Vuelvo a sentir un pequeño remesón después de un rato, abro mis ojos al ver una de las aeromozas sonriéndome apenada, es visible su cansancio-

.-hemos llegado ya, señorita...- le escucho después de sacarme mis cascos, la canción aun retumba en ellos

.- Gracias....- susurro y me dispongo a levantarme, tomo mi mochila, y al salir les agradezco por su servicio.

Camino por el túnel ya vacío, ni bien voy llegando a la sala de desembarque y escucho el bullicio allá y me vuelvo a colocar mis cascos no sin antes colocarme mi mascarilla, justo en el preciso momento en que la voz de Noah Sebastian se apodera de todos mis sentidos.

El frio día de Bangkok me recibe sin piedad, pero ni eso me hace reaccionar a la razón de mi regreso a esta ciudad, suspiro y sigo con mi camino traspasando a los demás que son recibidos entre abrazos y lágrimas de alegría en algunos y en otros sigo viendo las mismas prisas que llevan

Aprieto las correas de mi mochila avanzando, siento mi móvil vibrar, pero me niego a ver aquella notificación, alargare más mi pesar y seguiré el camino a aquel lugar a pie o en bus

Él sabía que regresaría, pero no el día ni la hora, si tanto quería mi regreso pues se apañara con la "sorpresa" de mi inesperada llegada hoy.

Una ligera lluvia cubre apenas las calles, pero aún recuerdo a la perfección cada ruta, cada avenida, me fui apenas hace 8 años de acá, pero todo me parece tan igual y tan soso como la última vez.

No sé cuánto es lo que llevo caminando, pero me da igual, tuve la opción de tomar un bus, pero desistí al segundo que vi cierto afiche publicitario y los rostros que reconocí en este.

Al parecer aún siguen siendo los mismos presumidos de siempre y lo que serán aún más si es que el idiota ese llegase a ganar las elecciones.

Ahora entiendo más de que va el requerimiento de mi presencia aquí

Por más que mamá le rogara que me dejara afuera de todo esto, el imbécil de mi padre encontró la forma de salirse con la suya, pero vamos a ver cuánto dura ese idiota que conmigo nunca la ha tenido nada fácil y no la tendrá jamás.

Desgraciadamente llego a mi destino le echo una mirada rápida al lugar a la par que soy rodeada por 5 hombres intentando imponer su rudeza al apuntarme con sus armas, suelto una risa que los hace enfurecer aún más al notar que no obtienen en mi la reacción del miedo y el temor que una persona común y corriente muestra cuando tiene un arma frente a sus narices.

Miro a cada uno de ellos, detallo a la perfección los pros y los contras, me percato del espacio entre ellos, uno intenta iniciar la lucha, pero yo esquivo su inútil asalto y rápidamente golpeo su nuca haciéndolo trastabillar y perder su imitación barata de lentes de sol.

Los demás se ponen a la defensiva y uno a uno vienen hacia mí, pero como era de esperarse uno a uno se retuercen en la acera al recibir lo que tanto buscaban

Me quito mis cascos, suelto un poco de aire aflojo las tiras de mi mochila

.-me alegra saber que los entrenamientos en tierras extranjeras dieran sus frutos.- entrenamientos ha dicho el muy cabron

メ Recuérdame (Freenbecky)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora