Dear Africa » harry styles (sin editar)

Capítulo 17

N/a: capítulo corto pero importante(? Espero sus votos y/o comentarios, recuerden que a los 100 votos actualizo :) Y quería decirles también que hace un par de días subí una nueva historia de Harry, llamada "Our Heaven", pueden encontrarla en mis obras :) x Eso, disfruten el capítulo bebas <3

Hillary punto de vista.

Creo que de todas las resacas que he tenido, ésta sin duda estaba a un nivel más alto que mis expectativas. Sentía la necesidad de beber litros y litros de agua y podía sentir la acidez en mi estómago, haciendo que me retorciera a lo largo de la cama.

Debía levantarme, pero no podía. Además de sentirme horriblemente mal, recordaba todo lo que pasó ayer como si fuera una especie de sueño. Y la verdad es que se me caería la cara de vergüenza si es que llego a ver a Harry.

Agradecí infinitamente al cielo al ver que el lado de la cama en donde había dormido él estaba desocupado cuando me incorporé. Si no, hubiera sido bastante embarazoso tener que enfrentarlo y, posiblemente, soportar sus burlas.

Busqué en el velador mi teléfono para verificar la hora y me sorprendí al encontrarme con un vaso de agua, una aspirina y una nota. Antes de beberme el vaso, abrí el papel doblado.

"Tuve que partir al aeropuerto para despedir a Zayn, posiblemente no despertarás hasta las doce ;) le enviaré tus saludos. -H xx"

Bebí todo el líquido de un golpe junto con la aspirina, mirando con el ceño fruncido su letra. ¿Para qué se empeñaba en darme explicaciones? Tampoco me molestó que despertara sin él a mi lado. Todo lo contrario; mientras menos lo vea, será mejor para mí.

Me levanté de la cama y cojeando, entré al baño para tomarme una ducha, evitando a cualquier costa el espejo colgado en la pared. Una vez lista, me vestí y calcé mi bota clínica para luego salir de la habitación y bajar a la cafetería.

Maldije por lo bajo al notar que estaba cerrada. Claro, tomar desayuno a las doce de la mañana era muy incoherente, y las reglas del hotel afirmaban que la cafetería debe estar abierta de 6:00 am a 11:00 am. Si tan sólo me hubiera despertado una hora antes...

Con el estómago vacío, inicié mi camino hacia la salida, con la esperanza de encontrarme algún taxi u otro medio de transporte que me llevara hacia la reserva. Pero como si todo se volviera a mi contra, no ocurría nada, por lo que estuve esperando casi una hora hasta conseguirme un aventón con un gentil hombre, quien me narraba su historia mientras manejaba hacia mi destino.

Una vez que llegué a las puertas del establecimiento, entré con un lánguido bostezo y saludé a Reth, quien atendía a los leopardos que habían nacido hace un mes.

-Dios mío Hillary, parecieras como si un camión te hubiera atropellado -se burló apenas puso sus ojos en mí.

Le lancé una mirada de "no me jodas" e inicié con mi trabajo, realizando la cura diaria a la cebra que le faltaba una pata para luego continuar con las suricatas que habíamos rescatado. Sonreí enternecida al ver que unos collares con sus respectivos nombres rodeaban sus pequeños cuellos.

Si Harry estuviera aquí, estaría fascinado con estos animales y su ego subiría hasta las nubes si llegara a saber que uno de ellos se llama como él.

Sacudí mi cabeza. No era tiempo de pensar en aquél rizado.

El día transcurrió como todos los demás, paseándome a lo largo del establecimiento, preocupándome por la salud y el bienestar de los animales. Sólo que en este caso, no lograba sacarme a Harry de la cabeza y de ese momento que tuvimos anoche en mi habitación. ¿Qué pensará de mí? Definitivamente y después de ese suceso, pensará que soy una pobre y deprimente chica que siempre ha ocultado esa personalidad bajo un perfil fuerte y segura de sí misma y que me hará burla hasta que nos vayamos de aquí.