Ámame de nuevo | JJP

10

Jinyoung se miraba ansioso en el espejo, tenía la sensación de que por primera vez en mucho tiempo se enfrentaba a algo que no podía controlar. Las horas de práctica y meditación no le servían de nada ante la situación a la que se enfrentaría en unos cuantos minutos. El elenco ya se encontraba sobre el escenario esperando a que Mark llegara y diera inicio a la práctica, pero ahí estaba él, como un cobarde escondiéndose dentro del baño. Escuchó como se abrió la puerta y suspiró. Debía de lucir patético con esa expresión de horror impregnada en su rostro. Sintió que pudo respirar cuando vio que sólo se trataba de Jaebeom, para él probablemente no era nada nuevo el verlo de esa forma.

—¿Te encuentras bien? — preguntó con preocupación genuina mientras le ponía el seguro a la puerta.

—Eso se podría malinterpretar— el pensamiento escapó de su mente y se coló en sus labios. Jaebeom se limitó a emitir una leve sonrisa.

—Descuida, es poco probable que eso suceda— camino despacio y se detuvo a unos pocos centímetros de Jinyoung sin atreverse a acercarse más —¿Me dirás qué sucede? — Jinyoung negó.

—Es una tontería hyung— intentó restarle importancia.

—No lo es si te causa malestar— le sonrió con comprensión y paciencia.

—Es sólo que...— suspiró decirlo en voz alta se sentía errado, como si estuviera desenterrando algo que prefería seguir ignorando.

—Adelante— Lo invitó a continuar y Jinyoung asintió. Sintió una punzada en el pecho, la expresión de Jaebeom le daba la impresión de que estaban ocho años atrás. Dios, lo había extrañado tanto.

—No me siento capaz de hacer la escena—cerró sus ojos con fuerza esperando las típicas palabras de aliento, pero nunca llegaron.

—Leí la escena y entiendo por qué te sientes así, pero tienes que enfocarte en que es eso, tan sólo una escena. Tú mismo lo dijiste, trabajaste tan duro para llegar hasta aquí, y puedes pensarlo como una forma de darle visibilidad a ese tipo de problemáticas. No hay nadie mejor que tú para representarlo— Terminó de acercarse y posó su mano en su hombro. —Otros actores pensarían únicamente en el reconocimiento de intentar encarnar un papel tan exigente, pero tú no, tú conoces bien el sufrimiento que atraviesan las personas en este tipo de situaciones, sabes lo que se siente porque atravesaste ese infierno una y otra vez.

—Hyung...— Jinyoung no podía creer que estuvieran hablando tan abiertamente de ello.

—Eres extremadamente talentoso Jinyoungie, nunca lo dudes. Lo harás bien. Estaré mandándote todo mi apoyo— Jinyoung abrió los ojos e inmediatamente atrajo a Jaebeom en un abrazo.

—¿Y qué si es demasiado para mí? Hyung, no puedo lidiar con los recuerdos, es demasiado doloroso. No creo soportarlo— Jaebeom se sorprendió al notar que el cuerpo de Jinyoung temblaba con brusquedad.

—Ey, ey, estoy aquí, ¿de acuerdo? Si es demasiado me encargaré de hablar seriamente con Mark para que modifique el guion— Jinyoung rió mientras un par de lágrimas se escurrían por su rostro.

—Mark nos echaría a los dos antes de modificar algo de su preciada obra— apenas pudo formular una sonrisa debido a los temblores.

—Jinyoungie, sé que puedes hacerlo— Jaebeom acarició su espalda con cariño para reconfortarlo y Jinyoung se aferró a él con más fuerza, como si su vida dependiera de ello.

Estuvieron abrazados por un par de minutos hasta que escucharon como tocaban la puerta. Ambos se separaron con timidez y sin saber qué hacer. Jinyoung tenía razón, si salían al mismo tiempo se vería algo extraño.