Capitulo 9: ¡Sorpresa! +18

197 48 6
                                    

POV Fausto

[¡Advertencia!, si eres menor de 18 años o una niña sáltate esta parte]

-Fausto~- gimió dulcemente Estrella al sentir como mi lengua exploraba sus puntos dulces.

-¡Dios mío es tan bueno~!- dijo entre gemidos Rosa rebotando en mi regazo y sintiendo las manos de la castaña.

Los gemidos de las 2 chicas resonaron por el carro dejando escapar todo el placer que ellas estaban sintiendo.

Comenzando a mover mis caderas, escuche el gemido satisfactorio de Rosa motivándome a moverme más rápido.

Sin ser una persona que deja sus cosas a medias, use mi pulgar eh índice para tomar el clítoris de Estrella.

-¡Fausto~!- gimió ella sintiendo como poco a poco iba llegando.

Aumentando el ritmo y fuerza de mi cadera pude sentir como las paredes suaves de Rosa me apretaban con más fuerza llevándome a mi propio nirvana que provocaría mi liberación.

-¡M-Me V-VENGO~!- grito en éxtasis Rosa sintiendo como se venia.

-¡F-Fausto~!- jadeo Estrella viniéndose al unísono.

Sin dejar de moverme o de sorber los jugos de estrella me acerque a mi propia liberación, el estimulo de comerme a una belleza como lo era Estrella, de ver como esta jugaba y lambia con los grandes pechos de Rosa y la misma Rosa rebotando ansiosamente en mi mástil, fue mas que suficiente para llevarme al borde de mi liberación.

Gruñendo de esfuerzo di una última estocada antes de salirme de la rubia, para correrme fuera.

No quería ninguna bendición.

Manchando el vientre de las chicas descanse por un momento.

-Tan bueno~- suspiro dichosa Rosa al sentir el placer después de correrse.

Estrella no dijo nada, pero ella sintió como sus piernas le fallaban y se acostó encima de Rosa que no le importo que ella estuviera encima de ella.

Estrella estaba encima de Rosa apretando su cuerpo con el suyo, a las chicas no les molestaba eso, pero cuando levante mi vista y las vi en tan peligrosa posición mi soldado se paro listo para otra batalla.

Levantándome me cerní sobre las chicas que sumidas en el placer no se dieron cuenta cuando estaba encima de Estrella.

-¿Fausto?- pregunto Estrella sintiendo como tomaba sus caderas -¡Faus-tooo~!- fue abruptamente interrumpida cuando sintió como lentamente me incertaba en ella -S-Sigo s-sensible- dijo entrecortadamente sintiendo cada centímetro de mi carne abrir su canal de amor.

-Tan apretado~- gruñí extasiado de lo apretada que estaba Estrella.

El Coño de Rosa era suave y mojado que combinado con el calor que desprendía daba la sensación de un hogar placentero, por otro lado el coño de Estrella muy apretado, pero con lo suficientemente húmedo para moverme por él, volviendo esa sensación de presión muy placentera, casi como si fuera un abrazo que mandaba un escalofrío a mi columna.

Tan centrado estaba que no registre cuando me había topado con la berrera de ella.

-¡Ah duele!- dijo jadeando Estrella.

Racionando con el grito de mi mujer volví en mí, y envainándome completamente en su arrebato la bese tratando de que se olvidara del dolor.

-¡Ahh~!- gimiendo en el beso sentí como me apretaba mas.

Sin saberlo el mundo acepto ese beso como símbolo de nuestra unión y con el mundo las Estrellas aparecieron.

Sintiendo como ella molía su trasero con mi pelvis lo tome como una señal de que ya podía moverme.

Perdido En Los Cuentos de HadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora