Todo lo que a Tengen hace feliz le pertenece, es natural entonces que tarde o temprano ese extraño barman con sabor a granadina también sea suyo.
AU moderno. Tengen alfa x Gyutaro omega y Douma alfa x Gyutaro
Pizca de Rengiyuu.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Uzui.exe dejó de funcionar.
Gyutaro, al seguir atrapado entre los brazos del alfa, puede oír el acelerado bombeo provocado por sus palabras soltadas tan a la ligera.
—¿Qué dijiste?
Ahora sí comienza a pensar que sigue con fiebre. Quizás incluso se quedó tirado por ahí en la calle y todo desde anoche ha sido una fantasía. Tiene los ojos muy abiertos, parpadea como tonto tratando de ver si Gyutaro se pone borroso o algo por el estilo.
Todo su rostro es de puro asombro, incredulidad.
—Me gustan las cosas sucias, miserables y patéticas. Mírate, eres un desastre– sonríe con burla, ambos saben que tiene razón.
Apesta, está pegajoso, su cabello está arruinado, todavía tiene cierto aspecto de moribundo, pero nadie llama sucio, miserable y patético a Uzui Tengen sin recibir su merecido.
Tumba al bruno bajo su cuerpo, mira directo al cerúleo que luce demasiado alegre para estar siendo dominado. Tenta los delgados labios, acaricia la piel con la punta de su nariz, busca las manchas debajo del maquillaje.
Cuando siente que es Gyutaro quien trata de iniciar el beso, Tengen se restriega con saña, empapa al omega gruñón con su sudor y la humedad de su cabello luego de una noche con fiebre y varios cambios de trapo, lame la palma que trata de alejarlo, hace todo lo que puede para molestarlo.
Esta vez sí recibe reclamos e insultos. Vaya, así no es como se imaginaba el momento en que Gyutaro al fin se volviera dócil ante sus encantos pero tampoco puede decir que le desagrada.
Ríe y también se burla en medio de la pelea, al menos hasta que vuelve a mirarlo a los ojos y se le escapa el aliento.
—¿Qué significa gustarte?
—Pff... Que voy a aprovecharme de ti y todo lo que puedas darme.
Tengen lo mira con seriedad.
—Yo puedo darte todo.
«Sí, lo he notado.»
—Bien, porque justo ahora tengo hambre y me urge un baño– limpia un poco su mejilla maltratada, intenta huir de la mirada que lo interroga pero ahora que se cree con muchas mayores libertades Tengen lo toma de la barbilla para que también lo mire.
—Primero me baño y luego preguntas.
Uzui acepta el trato.
Luego de volver a enojarse con los cientos de productos en el baño y pelearse con el jabón líquido que parece shampoo, Gyutaro logra bañarse y salir con la única toalla de cuerpo completo que encontró.
Es clara la decepción en el albino al ver que la toalla que a él apenas le cubre el trasero al bruno le tapa casi hasta las rodillas.
—Pedí algo a domicilio, debería llegar en un rato.
